Durante muchos años, la actividad de Joventuts Musicals des Mercadal i Fornells estuvo latente, pero la entrada en 2019 de una nueva junta directiva con el propósito de relanzar el proyecto, con Cati Pascual al frente, ha acabado dando sus frutos. Prueba de ello es la consolidación del Festival de Música Km 0, que el 6 de agosto inaugurará ya su quinta edición. Una muestra musical que responde a dos apuestas principales: dar protagonismo a los artistas locales, o directamente relacionados con la Isla, y que sean jóvenes o emergentes, aunque a veces estén acompañados por intérpretes más veteranos.
«En su día nos gustó mucho la idea, los resultados han sido positivos y hemos continuado», confiesa Pascual cuando habla de un proyecto con unos inicios que no fueron fáciles, ya que arrancó en tiempos de pandemia. El festival, que mira al mar desde sus escenarios, es una manera de repartir la actividad entre todo el municipio. Si durante el invierno el grueso de la programación se centra en Es Mercadal, en verano la música suena en Fornells.
Allí se han programado los cinco conciertos (todos a las 21 horas y gratuitos hasta completar aforo) para esta temporada, que se prolongará hasta el 3 de septiembre y se repartirán entre dos sedes. El Castell de Sant Antoni, como en años anteriores, y el recién estrenado nuevo espacio cultural de Fornells, Cas Contramestre. Si bien la apuesta inicial pasaba por los eventos al aire libre, el nuevo escenario entra en el formato con una nueva ventaja, la de poder alojar de forma permanente un piano.
La muestra musical, el último festival que quedaba por anunciar de este verano, llega con algo de retraso respecto a lo que había sido habitual hasta ahora, y en ello ha tenido que ver el hecho de que las fiestas patronales de Es Mercadal y Fornells hayan caído más tarde en el calendario. Sin embargo, el ‘KM 0’ viene con un plus este año. Una propuesta artística que llega desde fuera de la Isla: el Cor Jove Nacional de Catalunya, el 31 de este mes, en el Santuari de la Mare de Déu del Toro y a beneficio de Cáritas.
Un concierto que es fruto de la colaboración con las otras tres delegaciones en la Isla de Joventuts Musicals (junto a las de Ciutadella, Maó y Alaior) y que es una buena muestra de la sintonía que reina actualmente entre todas ellos. «Siempre intentamos buscamos ideas para poder colaborar y es algo muy bonito», concluye Pascual.
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