Amaral, ante el Heidelberg. | Mari Coll

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Penúltima jornada de la primera vuelta de la Liga Iberdrola y nuevo desafío para el Avarca de Menorca, que la semana pasada en la visita a Ciutadella del intratable líder, Heidelberg, vio truncado su camino de rosas que arrastraba desde hacía muchas jornadas, con un doloroso 0-3 que además mostró a un equipo, como el mismo Bep Llorens reconoció posteriormente, «algo fatigado». Esta tarde, a las 18 horas en el Polideportivo El Ferial, se juega un clásico de la Superliga femenina entre el local Haro Rioja y el Avarca, un partido con desafíos en ambos lados.

La escuadra menorquina necesita ganar y sobre todo recuperar sus mejores sensaciones, tanto para afrontar la vuelta europea de esta próxima semana con pensamientos positivos, como para, a nivel clasificatoria, seguir manteniendo la segunda plaza y pisando al primero, el tinerfeño Heidelberg. Sin embargo, las de Llorens tienen hoy delante al cuadro de la ex Valeriano Allès, Esther López, que lucha por atar un billete para la próxima Copa de la Reina de Ciutadella.

De cara a esta importante cita para las menorquinas señalaba ayer Llorens a este diario que han viajado a La Rioja un tanto tocadas físicamente, arrastrando todavía molestias de la semana anterior y que no han permitido entrenar con total normalidad estos días. Y es que Zoí Mavrommatis, Marcela Amaral, Carla Jiménez y Margó Ribot sufren molestias, sobre todo, Zoí y la jugadora mallorquina, y son serias dudas.

Esperanza riojana

Desde las redes sociales del Haro Rioja ya se han ocupado de que su masa social acuda a El Ferial esta tarde, ante la importancia del partido y del rival. Su imponente bloqueo y talento ofensivo de Carpintero y Folgueira, claves locales para entrar el miedo al Avarca.