La plantilla del Avarca de Menorca, el pasado viernes después de que la nueva capitana del equipo, la argentina, Antonela Fortuna, levantara el trofeo. | CVC

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Llegaba el éxtasis este pasado viernes por la noche en Menorca, cuando la reacción sobre la bocina de la nueva estrella mexicana del Avarca de Menorca, Grecia Castro, y el posterior ataque fuera de su adversaria, Sulián Matienzo– que mandaba fuera el balón–, suponían la machada bermellón. Las chicas del Avarca eran las nuevas campeonas de la Supercopa de España, por segunda vez en su historia ante un Hidramar Gran Canaria que parecía tenerle tomada la medida al conjunto menorquín pero que acabó claudicando ante un conjunto ciutadellenc muy duro mentalmente, con la opuesta gallega, Jimena Gayoso de estilete y en modo MVP y que supo rehacerse a la baja de su colocadora titular e indiscutible, Ivone Martínez, a la que Bep Llorens quiso resguardar por precaución, ante el inminente arranque liguero.

La impresionante gesta lograda por el primer equipo femenino del CV Ciutadella suponía dar carpetazo a la sequía de cuatro años sin añadir una estrella en sus camisetas, colocando la cuarta impresión en sus zamarras para este mismo curso 2024-25, después de la pasada Supercopa de España del 2020 en Ciutadella y de las dos flamantes Superligas Femeninas del 2010-11 y 2011-12, de la mano del manchego Chema Rodríguez, en los mejores años menorquines en sus largos y dilatados 19 años en la élite española.

En el majestuoso Gran Canaria Arena de la capital de la isla canaria y pese a comenzar mal las cosas– cuando en el último entrenamiento en Menorca la colocadora internacional mexicana Ivone Martínez sufría una contractura en el dorso que la llevó a reposar y no jugar la Supercopa–, el Avarca sumó su segundo título ‘supercopero’, tras sus finales en las ediciones de Murcia 2009, Haro 2012, Logroño 2014 y Menorca 2020, la primera en levantar, en el Pavelló y ante el Sayre.

Ver a la nueva capitana del Avarca de Menorca y una de las mejores de esta final de la Supercopa de España, la internacional argentina, Antonela Fortuna, levantando el trofeo que las acreditaba como vencedoras era la culminación a un sueño y una declaración de intenciones de cara a esta temporada 2024-25. Y más, con una demostración que este año el banquillo es extenso en la plantilla, ya que a falta de Ivone, Marina Saucedo demostró sus tablas cerca de la red, mostrándose una garantía y sin temblarle en ningún momento el pulso.

A la competición doméstica

Tras el baño de masas y de calor recibido desde la llegada de la expedición bermellón a Ciutadella y un fin de semana de celebraciones, toca la vuelta al trabajo y centrarse en la primera jornada de la Liga Iberdrola, precisamente y de nuevo, en pista del Hidramar Gran Canaria, que buscará venganza ante las insulares este sábado.

Quedó claro este viernes que el Avarca este año sí aspira y quiere todos los títulos españoles, la Liga y la que sería su primera Copa de la Reina, su gran cuenta pendiente en estas casi dos décadas en Superliga. Las del ‘poli’, han apuntalado la plantilla y contratado peso y potencia anotadora, lastre del curso pasado mismo.