Incide Llorens en que será muy importante cortar cuanto antes las malas rachas individuales de sus jugadoras ofensivas, para tener serias opciones de noquear por vez primera al Gran Canaria, como sí hizo hace dos semanas el Cajasol. Jimena Gayoso, en la imagen, se antoja vital. | Olímpico
Nos tiene gratamente bien acostumbrados esta temporada el Avarca de Menorca– también de manera histórica en sus casi 20 años en la Superliga femenina–, en protagonizar remontadas estando deportivamente contra las cuerdas y resurgiendo de las cenizas, cuando peor han estado las cosas. Y este fin de semana, empezando por esta tarde (18h) en el Pavelló Municipal de Ciutadella, Bep Llorens y compañía se enfrentan al desafío de la temporada y uno de los más complejos de su dilatada trayectoria en la élite del voleibol español femenino. Con un 0-2 en contra encajado en Las Palmas y la obligatoriedad de vencer hoy si no quieren ver como se acaba la temporada y hoy mismo el Hidramar Gran Canaria levanta el título desde el mismo ‘poli', las menorquinas necesitan hacer lo que no han logrado en todo el curso, hasta en cinco ocasiones ya. Ganar al Gran Canaria, para forzar mínimo el cuarto partido, que sería mañana también en el Pavelló.
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