El Avarca vence y convence ante el Santa Cruz

Este sábado por la noche, en un repleto y festivo Pavelló, las bermellones cumplieron con el trámite y con un juego sólido y solvente delante y detrás –a excepción del accidentado tercer set–, superaron al colista Santa Cruz. Ya de un principio el cuadro ciutadellenc echó tierra de por medio y el 10-4 en el electrónico del ‘poli' dejaba claro que, en principio, no habría resaca copera en las de Llorens. Juan Francisco Hernández, técnico visitante, pedía tiempo muerto, enfadado con la recepción de las suyas.

El colista de la competición intentaba entrar en partido, pero el 14-8 bermellón dejaba evidente la superioridad local ante las tinerfeñas. El 17-9 lo paraba nuevamente Hernández con un ‘tiempo', viendo como las de Llorens iban directas hacia la primera manga, ante la contundencia y sin error del Avarca. El juego era totalmente local y las menorquinas jugaban a placer (21-9), bloqueando a su gusto y mostrándose sin fisuras y muy contundentes en ataque, hasta un 25-12 que reflejaba lo que sucedía en la pista.

Con el plácido 1-0 para las subcampeonas de la Copa de la Reina Iberdrola, seguía erre que erre el Avarca liderado por una soberbia Allie Davenport-Link por zona ‘cuatro' (7-3). Jugaba Llorens con Liza Lazurenko y Mireia Orozco en pista mientras Santa Cruz intentaba entrar en partido desde la defensa. También entraba Alicia de Blas, inédita en la Copa, por Carla Jiménez, en la red. Y entraba y bloqueaba para el 10-5. Sufría en recepción el cuadro visitante y con 12-5 Hernández reunía de nuevo a las suyas.

Aprovechaba Llorens para dar reposo a algunas de sus titulares, tras la carga de la Copa, y lo aprovechaba la misma opuesta, Orozco, para lanzar a las suyas con 13-6. Avarca ponía la directa hacia el 2-0 con el 18-10 y Llorens daba descanso a Davenport-Link, entrando la internacional mallorquina, Lídia Gómez, para el servicio.

Las bermellones seguían inconmensurables en la red, bloqueando cualquier intento tinerfeño y acercándose al segundo parcial ganado (22-13). Santa Cruz insistía por ‘cuatro' casi como único recurso en ataque, hasta el 25-14 y el 2-0.

Epílogo con suspense

Entraba a pista la atacante mallorquina, Andrea Torres. Y no empezaban bien las cosas; un 4-9 visitante de arranque hacía que el espectador tuviera que frotarse los ojos. Las menorquinas se habían quedado en el banquillo y lo aprovechaba Santa Cruz, obligando a Llorens a pedir tiempo muerto.

El 5-12 mostraba las imprecisiones locales y el rival se crecía, viéndose obligado Avarca a reaccionar (7-15). Regresaban a pista Martínez y Jimena, pero un sonrojante 8-18 ponía ya casi imposible el set para las de Llorens, mientras agotaba su segundo tiempo muerto. El error condenaba a las suyas, pero se resistían a ir a un cuarto set, con 14-20. Al final, 17-25 y 2-1; ver para creer.

Intentaba Santa Cruz proseguir con su buen estado, pero el Avarca salía a no especular más y rápidamente se ponía 7-2 a su favor, lo que paraba el técnico canario. Las bermellones volvían a estar intratables en el bloqueo y Jimena y Amaral se ponían el mono de protagonistas para encarrilar el set y, por tanto, el encuentro.

Davenport-Link se gustaba a base de latigazos (16-8). El 18-10 de Jimena era respondido por el tiempo muerto de Hernández, al ver como se le iba el encuentro en Ciutadella. El saque directo de la gallega era el 21-11 y sufría Santa Cruz. Al final, 25-13 y 3-1 local.