Resultó un inicio arrollador del conjunto balear, que se mostró muy contundente en línea de ataque y no dio ningún tipo de opción a su rival. Su máxima ventaja fue de 8-16 para terminar ganando la primera manga por 18-25. La aportación en ataque de Wanda Banguero, con seis puntos y surtiendo de remates a Maira Westergaard (5) y a Carla Jiménez (3), no se vio frenada por el inexistente bloqueo del cuadro local.
El segundo set fue de lo más igualado. El cuadro ciudadrealeño mejoró ostensiblemente en el bloqueo, lo que le permitió disfrutar de una cómoda ventaja cuya máxima expresión fue un 14-7. Ni los dos tiempos muertos solicitados ni los cambios introducidos por Bep Llorens surtieron efecto. No fue hasta el reingreso en pista de Ivone Martínez y Wanda Banguero, unido a la aportación ofensiva de Amelia Portero (7), cuando el Avarca levantó una desventaja de siete puntos y logró dar la vuelta al resultado (21-22). Reacción finalmente estéril porque un parcial de 4-1 favorable al Kiele forzó el empate a uno (25-23).
El tercer acto siguió el mismo guion que el primero, al menos en sus inicios. El equipo menorquín recuperó la contundencia en ataque y forzó las opciones ofensivas de un Socuéllamos que pronto se vio superado (7-14). A partir de ahí, las prestaciones del bloqueo de la escuadra manchega tuvieron más incidencia en el juego y propiciaron la remontada local (22-21). El tramo decisivo fue parejo, pero las anfitrionas aprovecharon la inercia ganadora para dar la puntilla al set por idéntico resultado que el segundo (25-23).
El Volei Ciutadella afrontó el cuarto set con la firme intención de forzar el desempate y mostró su mejor versión. De ahí la máxima diferencia de ocho puntos (5-13) que se vio reducida a la mitad (9-13) tras el tiempo muerto solicitado por el técnico del conjunto socuellamino. A diferencia de los dos anteriores mangas, el cuadro de Llorens supo mantener y ampliar su ventaja (13-23) hasta el final (15-25).
El desempate trajo consigo mucho equilibrio y el intercambio de puntos fue constante. El Avarca gozó de sus primeras ventajas, mínimas eso sí, a partir del 11-12 y llegó a gozar de hasta cuatro bolas de partido. No estuvo acertado en el saque y dio la opción al Kiele Socuéllamos de sumar los dos puntos.
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