Mejoró el Avarca en cuanto a prestaciones respecto a la final del Ciutat de Barcelona aunque en los dos primeros sets, perdidos ajustadamente 23-25 y 24-26, las menorquinas estuvieron mal en recepción y en el servicio, además de flojas en la red. Delante, un Barça más rodado pero que sudaba para sacar adelante los sets, a pesar de las facilidades locales. Sería con el 0-2 cuando Llorens daría entrada a Neusa Neto– muy dura en el bloqueo– y la joven Aina Pons, que junto a Westergaard (15) y Noelia (15), hicieron reaccionar al Avarca para el 1-2 (25-23). Mejoraron las sensaciones en este ‘partidazo’ y el cuarto set fue un toma y daca constante, con Gómez de mal sueño y el punto definitivo de Caro (22-25) y 1-3.
Al final, el trofeo que se iba a Barcelona pero a pesar del dubitativo inicio de encuentro, las sensaciones positivas del Avarca, en el que Llorens volvió a hacer muchas rotaciones.
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