Las caras de las jugadoras eran la viva imagen de la decepción tras el partido; McNatt, Cano o D’Amaro no lo podían ocultar | Paco Sturla
Los nervios y la presión jugaron ayer una mala pasada al Valeriano Allès, que pese a su situación extrema de tener que ganar sí o sí, gozó de una pelota de 3-1 con 24-23 a favor y que finalmente no supieron aprovechar las de Llorens. El 2-3 final en el Pavelló, unido al punto conseguido por el IBSA en Murillo (3-2), dejaba a las ciutadellenques fuera de los Play off por el título. Y en una última jornada de liga no apta para cardíacos dada la máxima igualdad, nota predominante a lo largo de toda la temporada. Faltó suerte, algo de fortuna ayer para que el encuentro se decantara del lado bermellón, que le bastaba con ganar para estar en Play off. Pero esta le fue esquiva al Valeriano, incluso en el servicio; y eso que las cosas empezaban muy bien, con buenas sensaciones en el primer set (25-16). Las locales jugaban sueltas y a placer, muy enchufadas en el partido y con una gran Raquel Brun. Enfrente estaba un Vall d'Hebrón que parecía que la guerra no iba con él.
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