Los reyes del deporte insular

En línea de las ediciones previas, fueron múltiples las distinciones que se entregaron, al margen de las insignias de bronce (doce), plata (16) y oro (5). También se entregaron un par de insignias de cobre (a la Sociedad Hípica Amigos del Noble Bruto y al nadador parapléjico Martí Riera).

Algunos de los premiados, como obviamente del baloncestista del Real Madrid, Sergio Llull (bronce olímpico con España en Río 2016, por lo que se le concedió la insignia de oro, un año más), o el equipo cadete del Boscos –junior en el presente curso–, entre otros, no pudieron hacer acto de presencia, siendo sus galardones recogidos por representantes designados por los propios interesados.

La velada arrancó con la entrega de los diplomas y reconocimientos a los deportistas y entrenadores que dentro de los márgenes de 2016 alcanzaron final balear en su disciplina. Cross, karate, bádminton, gimnasia rítmica, tenis de mesa, vela, rugby, baloncesto... exponentes de todos los deportes en suma recibieron honores de la autoridades locales en un desfile prolongado, al que continuó la entrega del Premi Valors, instaurado a raíz del programa Posam Valors, alumbrado durante el año pasado por la Direcció General d'Esports. El mismo comprende dos premios; al equipo con mejor comportamiento y al equipo con mejor afición. Ambos recayeron en el equipo cadete del Atlético Villacarlos.

La ceremonia hizo un paréntesis para presentar la segunda edición del concurso Vídeo Valors y se proyectó el vídeo ganador de la primera edición. Posteriormente, se reemprendieron las entregas, con el capítulo de los reconocimientos de elite (insignias de oro, plata y bronce, además de dos de cobre), tras el que se dio el discurso de despedida de la Gala de l'Esport 2016, que un año más, no dejó ningún mérito ni logro en el olvido.