El gol fue decisivo para el desenlance del partido. - Photodeporte

TW
0

La pena máxima anotada por el delantero del equipo riojano Osado a los 33 minutos de juego privó al Sporting Mahonés de llevarse algo positivo de Logroño, ya que aunque su rival tampoco ofreció un recital ofensivo, el gol desde los once metros fue decisivo para que los tres puntos se quedaran en casa (1-0). Ésta supone la tercera derrota de una segunda vuelta teñida en su mayoría por empates para el cuadro de Joan Esteva. Además, con la derrota se marcharon las esperanzas de alcanzar los puestos que ofrecen disputar la Copa del Rey para un equipo que ayer encaró el partido bajo mínimo debido a las múltiples bajas. Esteva alineó a Miquel Capó en el eje de la defensa y a Vates en el centro del campo.