"Tengo muchas ganas de jugar y sentirme útil para el equipo"

El mallorquín, que disputó su último encuentro frente al Vila Joiosa el pasado 24 de enero, se lesionó el 1 de febrero en el entrenamiento, por lo que lleva un mes y medio alejado de los terrenos de juego. "Tengo muchas ganas de jugar y sentirme útil para el equipo. Ahora tengo que superar la lesión psicológicamente, no tener miedo y no pensar en el tobillo", afirma el ex del Binissalem.

El habilidoso extremo reconoce que los partidos desde fuera se ven de otra manera y sin duda, se sufre más. "Se han escapado un par de puntos en casa que no se podían perder pero del lunes pasado a hoy -ayer por el lector-, me he encontrado un vestuario diferente, se ha pasado de una desilusión muy grande a una euforia terrible", apunta.

Esto se debe lógicamente a la victoria ante el filial azulgrana, que ha disparado las expectativas del equipo y ha calmado los ánimos de cara al final de temporada y al complicado calendario que aguarda al equipo. "La victoria en el Mini ha hecho que el equipo coja mucha confianza y estemos muy ilusionados para el partido ante el Benidorm", resalta.

Reynés afirma además que el último triunfo ha inyectado "mucho optimismo" en el vestuario aunque el partido ante los alicantinos no será nada fácil. "Ni el lunes pasado éramos tan malos ni hoy -por ayer- tan buenos. El Benidorm ofensivamente está a la altura del Barça por lo que no será fácil ganar", destaca.

Eso sí, de conseguirlo, el sólleric sabe que la permanencia estaría más que cerca. "Ganando el domingo sería un paso de gigante para lograr el objetivo. Con otra victoria casi estaría hecho y afrontaríamos con mucha tranquilidad el final de temporada", concluye el centrocampista.