La dieta estándar de un periodista de rango raso durante unos Juegos Olímpicos es la peor pesadilla de un endocrino. Un rompecabezas imposible de resolver por cualquier nutricionista. Una aventura por encontrar un momento, un lugar y algo en condiciones -y a qué precios en ocasiones- que echarse a la boca. La carga en el supermercado de turno, en mi caso una tienda oriental en la calle en la me alojo, dibuja la cesta de la compra básica para tirar durante todo un día de viajes en metro, RER, autobús, caminatas o tranvía. Barritas, galletas, snacks... cosas ligeras y que abulten poco.
DIARIO DE PARÍS
La dieta del periodista
También en Deportes
- Giro de 180 grados en la Seguridad Social: El Gobierno da la vuelta a la edad de jubilación este 2025
- La mejor hamburguesa de Menorca se cocina en Cala Blanca
- Empresas de alquiler turístico estallan contra el Consell de Menorca: «Su campaña es ofensiva»
- Bolets de Menorca, el mejor emprendimiento rural de España: gana el Premio Tierra de Oportunidades
- El emblemático Bar Peri de Es Migjorn se pone a la venta ante la falta de relevo generacional
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Menorca - Es diari
De momento no hay comentarios.