Los locales se adelantaron en el electrónico, y antes de encajar el empate, tuvieron dos claras ocasiones para haber ampliado la renta, y poner en un serio aprieto al cuadro catalán. Si enfrente tienes un conjunto superior y no se aprovechan las llegadas claras, finalmente el ‘grande' lo aprovecha, y este es la lección que tiene que extraer el Atlético Villacarlos para posteriores partidos.
Se esperaba a un Espanyol que saliera en plan dominante y acorralando al cuadro de Es Castell, pero no fue así. El cuadro de Joan Melià saltó al terreno de juego dispuesto desde el inicio a plantar batalla. En el minuto 9, ya llegó la primera gran ocasión. Un disparo de Sebes fue salvado por el larguero.
Los catalanes a ratos por su calidad tenían el control del duelo, pero de nuevo los locales tuvieron cerca romper el resultado inicial. Un chut de Molano fue desviado a la esquina por el meta Pirot. En la jugada siguiente llegó el primer aviso espanyolista. Un disparo desde la frontal fue salvado el travesaño. En una nueva aproximación ‘amarilla' llegó el 1-0. Un claro penalti por manos de un zaguero catalán, fue transformado por Molano para dar ventaja a los locales en pleno éxtasis menorquín.
A partir de aquí se vivieron los mejores minutos del Atlético Villacarlos, donde pudo liquidar el encuentro. La primera la tuvo Arthur, justo cuatro minutos más tarde, Molano. Quedó con ‘vida' el conjunto de Luís Blanco, y antes del descanso logró empatar el choque. Roca fue el autor de las tablas.
En la segunda parte en el Municipal de Es Castell el cualificado RCD Espanyol no tardó en anotar el segundo tanto y buscar cuanto antes la sentencia para no correr peligro. Una gran jugada colectiva de los catalanes fue culminada por Ferrán. Los locales quedaron tocados al recibir el 1-2 y los catalanes lo aprovecharon para acabar goleando un encuentro de dos partes diferenciadas.
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