Tomeu Amengual intenta sujetar a Elías en una imagen del encuentro de este viernes | Javier Coll

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Al Atlético Villacarlos se le escapó una buena oportunidad de sumar, tras seis semanas en negativo, en un encuentro que puso de cara el conjunto de Lluís Vidal al cuarto de hora de juego con los goles de Álex y Pere Pons. Sin embargo, los errores defensivos penalizaron -tres acabaron con el balón en las mallas de Pau López- al colectivo amarillo que al final entregó una nueva derrota. Dolorosa, porque el equipo había estado entonado durante los 30 minutos iniciales ante un Mallorca que logró alterar el duelo tras recortar distancias y que lo hizo suyo con el empate a poco de comenzar el segundo tiempo. Toca seguir trabajando.

El Villacarlos salió intenso e instaurando las dudas a la zaga rojilla con su presión que le permitió recuperar balones en la parcela rival. En una de ellas, la acción acabó con un penalti sobre Álex que el propio jugador transformó. El once de Vidal que estuvo generoso en las ayudas y que mordió cada balón dividido para ganarlo y sacar situaciones de ventaja en ataque, volvió a golpear en una falta que cabeceó Xavi al travesaño errando Bernat en la recepción, regalo que aprovechó Pere Pons, siguiendo la jugada para colocar el 2-0. Restaba un mundo por delante pero las sensaciones que destilaba el Villacarlos eran más que positivas.

La buena ventaja duró escasos minutos, los errores en cobertura los sigue pagando muy altos el cuadro local y la escuadra de Carlos Muñoz, sujetada hasta entonces por el ímpetu de los menorquines, se metió en el partido con un pase a la espalda de Albín que Elías definió a la perfección. Pese a ello, el Villacarlos encajó bien el golpe y tuvo el tercero con un remate de Llorente (26') desde el interior del área tras un error de Carlos en el despeje que habría significado minimizar el tanto de Elías. A partir de aquí, el Mallorca empezó a manejar más el balón y tuvo un par de aproximaciones con peligro antes de alcanzar vestuarios.

Giro

El retorno no pudo ser peor para el grupo de Lluís Vidal ante un Mallorca con otro dibujo. El lateral Carlos firmó el empate tras recibir de Albín para mostrar otro escenario. Con Alorda retrasado al eje de la zaga y con los laterales asumiendo roles más ofensivos, los visitantes se hicieron con la cita mientras el Villacarlos perdía su referencia -Pau Oliver- en la zona ancha y tenía problemas para asomarse en ataque aunque tuvo una contra para hacer el 3-2. Poco después, un balón que no se sacó, derivó en un saque de esquina que Ismael cabeceó sin oposición. Al Villacarlos le tocó construir sin excesiva fortuna. Se pidió penalti de Bravo sobre Llorente que no fue y en el tramo final, Gálvez sentenció con otro remate muy cómodo y sin respuesta defensiva.