Victoria de enorme valor anímico y de impacto en la competición la conseguida por el Mercadal en el campo municipal de Sa Pobla, frente a un Poblense que acumulaba diez victorias en los últimos once partidos -más un empate- y que claudicó sorprendentemente gracias a un testazaro de Guillem Martí -su segundo gol- en el minuto 89 tras un centro de Rubén Carreras, que el delantero centro atinó a conectar picado, entre dos defensores para superar a Santi.
El segundo triunfo consecutivo del equipo de Julián Calzada llegó por la vía de un planteamiento férreo atrás, que bloqueó la mayoría de intentos de generar peligro sobre la meta defendida por Jandro Pozo. La salida del equipo de Óscar Troya fue la esperada, con el control del balón e intentos en vano de atosigar la retaguardia menorquina. Las acciones protagonizadas por Aitor o Paco Plata no derivaron en claras ocasiones de gol y la presión del Poblense fue menguando. El ejercicio de contención mercadalense resultó hasta el punto que en el último cuarto de hora antes del descanso el Poblense ni apareció por las inmediaciones del área visitante.
Tras el intermedio el entrenador mallorquín cambió a Plata por Diego. Pero el guión apenas se alteró, el Mercadal contenía las acometidas del Poblense, a quien prácticamente negaba cualquier opción de profundizar. El equipo de Calzada se adaptó a las dimensiones de un campo mayor que el de Sant Martí y de césped natural. El paso de los minutos incrementó los nervios en la parroquia local, incrédula ante la oposición planteada por un rival de la zona baja. Tanto, que hasta se llegaron a solicitar dos penas máximas en sendas acciones protagonizadas por Gili y Aitor, que no apreció el colegiado.
El entrenador visitante también movió el banquillo para mantener la intensidad y en el minuto 89, prácticamente en el único remate claro visitante, Guillem se anticipó a los defensas para atar tres puntos de oro.
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