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PENYA CIUTADELLA 1

C.E. ESPORLES 1

El Penya Ciutadella ha desperdiciado una ocasión de oro para aproximarse a la zona de salvación la tarde de este sábado en Son Marçal. Su rival el Esporles, es el conjunto que marca la permanéncia y salió reforzado de su visita a Ciutadella. Los hombres de Andreu Llistó, en el último minuto de la primera parte se quedaron con diez jugadores al ver Gaspar la segunda cartulina amarilla, y perdiendo por 1-0, tras el tanto conseguido por Quel.

Aún así, los hombres que dirige Pere Vadell, fueron incapaces de derrotar al Esporles jugando con superioridad numérica durante la segunda parte. Debutó Biel Medina, que junto a Raül Capó mejoraron la prestaciones defensivas locales, pero no fue suficiente para parar la sangría de puntos perdidos. El estadio registró una muy buena entrada de espectadores, y el respetable se quedó mudo con el devenir del partido sobre todo en la segunda parte, donde los locales no fueron incapaces que crear ocasiones claras, y vieron como en nuevo grave desajuste defensivo, Fran empataba el choque.

Inicio esperanzador
La primera aproximación del encuento fue clara para los intereses locales. Un remate de cabeza de Biel Medina fue repelido por el larguero, y el rechace no lo pudo culminar Raül, siendo obstaculizado por la zaga visitante con un posible penalti. Seguía el Penya intentándolo, y un centro de Stviven en largo, fue aprovechado por Quel para anotar el 1-0. Todo se ponía de cara para los locales, y aún más con la expulsión de Gaspar al borde del descanso. Anteriormente el Esporles, reclamó una pena máxima a su favor. Con el 1-0 se llegó al descanso.
En la segunda parte, los hombres de Pere Vadel con superioridad numérica , se fueron atrás y los visitantes empezaron a hacerse con el mando del encuentro. En el minuto 55, llegó el mazazo.

En una falta a favor de los hombres de Andreu Llistó, fue ejecutada con rapidez cogiendo a la zaga local despistada, y Fran superó a David , tras tropezar el esférico con un defensor del Penya. Fue un jarro de agua fría para el conjunto local que con 35 minutos por disputar de encuentro, fueron incapaces de crear ocasiones de gol. Los hombres de Pere Vadell lucharon pero con más corazón que cabeza, y eso fue aprovechaco por el Esporles, para hacerse fuerte en labores defensivas y aguantar sin apenas sufrir la embestidas ciutadellencas.

Lo intentó el Penya de todas las maneras, peron sin tener la ideas claras. Se protestaron tres fueras de juego en jugadas de ataque de la escuadra local, que cada una de ellas, estaba al límite . Al final un empate que sabor a derrota para el Penya, que no arranca la segunda vuelta liguera con buenas perspectivas. Ya quedan pocas balas en la recámara.