El Alaior coloca los cimientos del retorno

El club necesitaba un reconstituyente y el trago copero ingerido a costa del Sporting de Mahón apunta al estreno de un nuevo ciclo en la sociedad presidida por Antoni Alzina.

«Nos hemos quitado un peso de encima», reconocía en plena resaca dominical Gerard Fuguet (1991), autor del tanto que subía al marcador el 2-1 definitivo. Golazo con sabor a título.

El éxito puntual hace más llevadera la travesía del desierto que alcanza su cuarta temporada, tras más de tres décadas siendo un referente en la competición autonómica. «Subir es la intención», admite el joven delantero, «pero todo pasa por hacer un buen papel en la liga. De momento el título nos genera tranquilidad y confianza para afrontar la próxima competición».

El proyecto que lidera desde la banda Julián Calzada tiene su atractivo y un plus de confort que genera una plantilla amplia. Tanto, que puede permitirse superar la media docena de bajas en la final de Copa -«todos pueden ser titulares», apunta Gerard- y diseñar un once de la máxima solvencia.

El día después de la consecución de un título necesario, Gerard reflexiona sobre la importancia de avanzarse en el marcador. «Si hubiésemos encajado un gol en la primera parte, remontar hubiese resultado difícil por la capacidad defensiva del Sporting», explica.

El Alaior se adelantó, primero, y encajó bien el empate, «aunque no niego que pensase en la tanda de penaltis. Las piernas nos empezaban a pesar por el esfuerzo». Su gol despejó toda duda, un remate «perfecto. El balón fue donde tenía que ir».

La liga

El Alaior estrena el calendario liguero el domingo en el campo del Menorca y luego recibe al Sporting. La revancha copera, dos semanas después. «Queremos los seis puntos para pasar una buena Navidad» y estrenar el nuevo año con Sami y Unión. Gerard acepta el cartel de favorito, pero a compartir «con Sporting, Sami y Unión».