Los rojiblancos viajan esta tarde a Euskadi con la moral a tope

La expedición insular, a la que acompañarán algunos aficionados, hará escala en Barcelona y Bilbao, desde donde fletará un bus para ir a Sestao, donde pernoctará. El equipo no podrá ejercitarse en el campo de Urbieta, escenario del partido, debido a la lejanía entre este y el lugar de concentración.

La semana se ha desarrollado con normalidad en el seno rojiblanco. El grupo descansó el miércoles y trabajado el resto de días.

Ilusión y ambición se fragmentan a partes iguales, tanto en el sentir de Vidal como de sus jugadores. «Yo quiero subir a Segunda B, por el pueblo y por el fútbol menorquín, que merece tener un equipo en Segunda B; creo que vamos con un buen resultado, el Gernika debe marcar, y nosotros, con espacios, podemos hacerles daño», relata uno de los capitanes, Javi Lacueva, que recuerda en la ida «nos centramos en no encajar gol y lo conseguimos».

«Sabemos lo que tenemos que hacer allí para pasar», termina.