«Un regalo». Eso es lo que supuso tanto para Albert Torres como para Ruth Moll encontrarse en pleno campo de entrenamientos en las alturas de Sierra Nevada, donde preparan sus nuevos retos | R.M.
Uno se está preparando de lleno para el reto de su vida, los próximos Juegos Olímpicos de Tokio 2020; la otra, para su enésima aventura sobre la bicicleta de montaña, cruzar Irán en bici por la igualdad, este próximo mes de septiembre. Y casualidades de la vida, lo que hace muchos meses– «un par de años quizás»–, que no les sucede en Ciutadella, ha ocurrido este fin de semana en las alturas del Pico Veleta de Sierra Nevada. Albert Torres y Ruth Moll, los dos ciclistas de referencia a día de hoy del panorama menorquín, con el permiso ya de los jóvenes Francesc Barber y Jaume Bosch, que empiezan a dar que hablar a nivel internacional, se encontraron casualmente en el macizo de Granada, mientras se estaban ejercitando.
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