La suma correlativa de triunfos ha atajado de raíz la incertidumbre que se generó durante la corta pretemporada efectuada por la plantilla dirigida por Joan Martínez Escala, especiamente tras las dos derrotas frente al Muro.
El grupo de Bea Pacheco inquirió, con su juego y los resultados finales (56-68 y 84-47), sobre la capacidad competitiva del Made in Menorca. Interrogante acrecentado al día siguiente tras la última cita de preparación contra el Palma Air Europa (90-63).
Sin embargo, el estreno del calendario de la liga regular EBA ha disipado buena parte de esas dudas, características también de un equipo en construcción. El Made in Menorca ha exhibido las credenciales propias de un equipo de la categoría y ha demostrado, en el escenario de una competición oficial, disponer de las propiedades necesarias para rivalizar con el resto de integrantes del grupo C-A.
Ahora bien, el equipo residente en Ses Canaletes tampoco debe llevarse a engaño ante una realidad que puede adulterar las percepciones y conclusiones derivadas de la racha de triunfos. Basta echar un vistazo a la clasificación para aplicar el freno de mano ante cualquier atisbo de euforia o exceso de confianza.
De los tres resultados favorables, dos se han conseguido ante El Olivar y JAC Sants, actuales inquilinos de las dos últimas plazas de la tabla. Aún así, ambos equipos, amalgama de juventud (entre 16 y 19 años la mayoría de sus jugadores), talento e indudable proyección, han discutido el triunfo al Made in Menorca hasta el último minuto.
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