La superioridad en el rebote (44 capturas para el Barcelona por 30 para el Real Madrid) y el dominio de Tomic, Pleiss y Thomas sobre Bourousis, Mejri, Ayón y Reyes en el juego interior fueron claves en el desenlace final.
El Real Madrid empezó con mucha fluidez en su juego, con Rudy Fernández y Llull muy efectivos desde la línea de 6,75 y Jonas Maciulis dominando la pintura (8-13, minuto 5). Un minuto antes, Pascual hacía debutar a su nuevo fichaje, el escolta francés Edwin Jackson, pero tenía que parar a Maciulis y, tras un triple de Hezonja, (11-13) sentó al croata dando entrada de nuevo a Deshaun Tomas.
Esta acción dio resultado y Marcelinho ponía ya arriba a los azulgrana (16-15, minuto 7), mientras el Real Madrid evitaba el despegue catalán por medio de las acciones de Sergio Llull.
Tras el 24-22 del primer cuarto, el ritmo del partido aumentó y mediado el cuarto el propio Satoransky junto a Thomas lograban un parcial de 6-0 (37-29, minuto 15) y Sergio Llull volvía a pista como director del juego visitante. Al descanso (47-40).
Ambos equipos volvían a sus quintetos iniciales tras los dos primeros actos, y de nuevo Maciulis no podía ser parado por la defensa barcelonista. El Madrid llegaba a ponerse a tres puntos en dos ocasiones (54-51, minuto 28).
El choque perdió brillo y el Barcelona mantenía arriba la ventaja con acciones interiores de Ante Tomic, pero con medio segundo para cerrar el cuarto una jugada increíble de estrategia del Real Madrid permitía a Salah Mejri dejar el marcador en 58-55.
El último cuarto se abría con rápidas acciones del Barcelona, con Hezonja de nuevo en pista, por medio de Satoransky y Jackson, que anotaba sus primeros puntos como azulgrana con un triple (63-55, minuto 32) Marcelinho relevaba a Satoransky y Tibor Pleiss cerraba el rebote azulgrana, siendo precisamente Pleiss el que daba la máxima ventaja a los de Pascual (71-60) a 2:50 para el final que ya sería suficiente para asegurar el triunfo.
1 comentario
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Cadascu es posa el nom que mes li agrada, per aixo som mliures. En Llull sempre es diu Sergio i la seva decisio es respectable. He escoltat Laso en el temps mort i es dirigeix a n'en Llull com Sergi, en la nostra llengua. Segons la mentalitat deLaso potser involuntariament ha pensat: Menorqui igual Sergi. O pltser han estat els nirvis i la tensio del partit.