Una aula de un centro escolar concertado.

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La demanda de plazas en los centros que forman parte de la patronal Escola Catòlica de Baleares han incrementado respecto al curso anterior, aumentando en 200 los alumnos nuevos. La entidad ha celebrado que la sociedad «siga confiando» en sus centros en un contexto de bajada del número de alumnos de tres años por el descenso de la natalidad.

La patronal asegura que los datos del proceso de admisión que se está llevando a cabo en los centros públicos y concertados en las Islas «ponen de manifiesto el previsto descenso del alumnado de tres años como consecuencia del descenso de natalidad, agraviado por los efectos de la pandemia y el confinamiento del año 2020».

La presidenta de Escola Catòlica, Llúcia Salleras, ha manifestado su «satisfacción por esta tendencia, esperando que se consolide en los próximos cursos». Aun así, la patronal apuesta por una bajada selectiva de las ratios mínimas de alumnado en aquellas poblaciones especialmente golpeadas por el descenso de la natalidad. Sin duda, ha señalado Salleras, «esta es una oportunidad para tratar de dar satisfacción a una constante demanda de los sindicatos de docentes para poder ofrecer una atención más personalizada a su alumnado».

Cabe recordar que la Conselleria d'Educació anunció que analizaría la posibilidad de cerrar 47 aulas de 18 centros concertados laicos y religiosos de Balears. Del total, 29 corresponderían a las del Aixa-Llaüt del ParcBit, centro vinculado al Opus Dei que separa a los alumnos por sexo y podría perder las ayudas públicas que recibe si continúa segregando, en virtud de la aplicación de la LOMLOE, como ya avanzó este diario a finales del año pasado.

Los resultados electorales puede que cambien esta situación porque el PP, que previsiblemente accederá al Govern, con o sin Vox, ya aseguró que evitaría cerrar aulas de la enseñanza concertada pese a este fenómeno demográfico.