Los representantes de Cs en la anterior legislatura se dirigen al Parlament. | J.T.B. | PALMA

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La pérdida de poder institucional deja en una situación muy delicada a Podemos y Cs, que ya no recibirán subvenciones ni del Parlament ni del Consell para financiar los gastos del partido. En el caso de Cs será especialmente complicado ya que el partido ha perdido toda su presencia institucional en Parlament, Consell y ayuntamientos. En el caso de Podemos, se da casi la misma situación ya que solo tiene un diputado, que deberá integrarse en el Grup Mixt, y solo ha logrado un concejal.

El Parlament tiene establecida una subvención fija de 4.771,5 euros al mes para cubrir los gastos de mantenimiento de cada grupo parlamentario. La Cámara abona, además, 1.101,13 euros por cada uno de los diputados. En el caso de Podemos, con seis diputados en su grupo parlamentario, ingresaba al año por este concepto 136.539,36 euros, que ahora quedarán reducidos a 13.213 del único diputado que han conseguido. Se integrará en el Grup Mixt, por lo que tampoco percibirá el fijo establecido por grupo.

Cs y el PI

En el caso de Ciudadanos, el partido dejará de ingresar 123.385,8 euros en concepto de subvención fija y variable en función del número de diputados. Esa subvención se redujo en la última etapa en 13.213 euros por la expulsión del grupo de Maxo Benalal, que se integró en el Grup Mixt. En el caso del PI, la pérdida de ingresos en el Parlament será de 96.898 euros al año, pero seguirá percibiendo cantidades del Consell y de los ayuntamientos en los que tiene presencia.

En el otro lado de la balanza están el PPy Vox. Los ‘populares, con 25 diputados, podrán ingresar 387.597 euros al año de subvención parlamentaria. Son casi 120.000 euros más de los que han percibido en esta legislatura. En el año 2015, cuando el PPpasó de 35 a 20 diputados y el efecto económico fue tan grave que incluso se plantearon la posibilidad de vender la sede.

Vox ha conseguido 8 diputados frente a los 3 que tenía en la pasada legislatura y eso supone que    pasará de ingresar unos 66.000 euros al año a conseguir una subvención parlamentaria de 162.955,48 euros al año con los nuevos resultados. El PSIBy Més se quedan más o menos como estaban ya que han mantenido resultados: unos 295.000 euros y 110.000 respectivamente. A la pérdida económica se suma además la pérdida de los asesores de los grupos parlamentarios que pagaba el Parlament: dos en el caso de Podemos y tres en el caso de Cs. Tampoco los tendrán ahora.

Una de las primeras cuestiones que deberá decidir el Parlament es si sube o no el sueldo a los diputados. Los parlamentarios tienen sus asignaciones económicas congeladas desde el año 2020 porque no ha habido acuerdo entre los partidos para aprobar una subida salarial que sí se ha hecho el Govern balear.