La propuesta de la comisión se enmarca en un contexto internacional complicado, donde la tendencia es que cada vez falten más recursos y sea necesario depender menos de fuentes energéticas externas, como dice el informe. | Gemma Andreu

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La Comissió de Medi Ambient de les Illes Balears recomienda al Govern que planifique un decrecimiento del consumo energético en el Archipiélago, no solo por motivos de ahorro, sino también de contención del crecimiento. El trasfondo del planteamiento busca cuestionar las perspectivas que prevén un desarrollo ilimitado del consumo, aunque sea utilizando fuentes de energías renovables, como la solar.

Esta es una de las consideraciones técnicas que la comisión ha propuesto a la Conselleria de Transició Energètica en la fase inicial de la evaluación ambiental del Pla de Transició Energètica i Canvi Climàtic. Este documento, en trámite, alude al «decrecimiento de la demanda energética» y apuesta por reducir la «dependencia energética» y avanzar hacia la «autosuficiencia» y «garantía del suministro» de las Islas. Sin embargo, la comisión considera que debe enfatizar más la idea de reducir el consumo. «Falta aludir a la disminución del consumo energético entendido como cambio del modelo de producción y consumo», según se afirma en el informe de la comisión.

El plan que tramita el Govern prevé dos escenarios futuros. El primero analiza la demanda energética y el consumo de energías renovables que se producirían de cara a 2030 si no se aplica ninguna medida del plan y suponiendo un incremento mínimo de las renovables. El otro escenario contempla las actuaciones de ahorro, eficiencia y diversificación energética que prevé el Govern con el objetivo de reducir las emisiones en un 40 % respecto a los niveles de 1990, así como los resultados de penetración de renovables respecto al consumo final del 35 %.

La comisión recomienda contar con una tercera alternativa técnicamente viable que concrete un escenario en el cual se apuesta por reducir la presión humana, por el cambio de hábitos de consumo y de movilidad, y por la protección del medio natural, incluyendo un decrecimiento planificado.

El mismo informe de la comisión propone mejorar las interconexiones y frecuencias del transporte público entre los pueblos de las Islas y desarrollar la red ferroviaria electrificada del tren, tranvía y el ferrocarril metropolitano. Asimismo, se sugiere incluir el uso de combustibles alternativos y que se evalúe el efecto de la velocidad del tráfico en el incremento de las emisiones contaminantes y aplicar medidas si es necesario.

En la misma línea, la comisión recuerda que en el plan se puede introducir una medida para limitar la entrada de vehículos de alquiler en cada isla, como ya ha hecho Formentera y prevé hacer Ibiza. Además, el informe menciona medidas de fiscalidad verde sobre los rent a car.