Imagen de archivo de una anterior manifestación recorriendo el centro de Palma el Día del Trabajador. | M. À. Cañellas

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«No volveremos a pagar esta crisis los mismos, no renunciaremos a las subidas salariales». Los secretarios generales de UGT y CCOO en Baleares, Lorenzo Navarro y José Luis García, han hecho un llamamiento para que la gente en general y la clase trabajadora en particular se echen a la calle de forma masiva en la manifestación del próximo 1 de mayo para reclamar subidas salariales en consonancia con el aumento de la inflación que ha traído consigo la guerra de Ucrania.

Estas subidas, ha remarcado Navarro en una rueda de prensa de prensa conjunta en la sede de UGT, «son imprescindibles para hacer frente a una inflación desbocada». Tanto el portavoz de UGT como su homólogo en CCOO han hecho hincapié en que la cita del próximo domingo es para «celebrar conquistas» como la reforma laboral, la firma de más contratos indefinidos que temporales o la subida del salario mínimo interprofesional, pero sobre todo para nuevas reinvindicaciones, especialmente las dirigidas a las medidas para paliar los efectos de esta crisis sobre las familias y las clases trabajadoras.

Las dos principales propuestas sindicales para hacer frente a esta crisis son el control de los precios y la mencionada subida salarial, con lo que se logrará, recalca Navarro «que el consumo interno tire de la economía». Así, recalcan que la suya es una «propuesta moderada» en la que, de media, el salario balear subiría entre un 2,5 % y un 3,5 % en Baleares. Este incremento «protegería a los trabajadores de escenarios inflacionistas como el actual».

«Estamos de enhorabuena porque hemos recuperado derechos con la reforma laboral después de 40 años con reformas que solo conseguían lo contrario, pero hay que mejorar muchas cosas», ha señalado García para insistir en que el alza inflacionista, ya cerca del 10 %, «es un mordisco demasiado grande para los salarios».