La ley que permite ampliar hoteles o convertirlos en VPO decae este sábado

Los establecimientos de restauración, entretenimiento, recreo, deportivos, culturales o lúdico podían ampliar un 15 % su capacidad para mejorar la calidad, la sostenibilidad medioambiental, la seguridad o la accesibilidad. El resultado ha sido la inversión de 112,3 millones de euros desde que se aprobó el decreto ley. Previamente estaba en vigor una norma similar para mejoras ambientales que a su vez modificó otra aprobada anteriormente por el Govern de José Ramón Bauzá que sí permitía la ampliación de plazas hoteleras. Entre 2013 y 2017, el Govern tramitó un total de 778 expedientes de ampliación y el pico de inversión se produjo en 2015, con un total de 374,9 millones.

La modificación de la normativa por parte del Pacte provocó una caída en los proyectos presentados. En el año 2020 se presentaron 8 expedientes, por un importe de 30 millones de euros. Las peticiones de inversión han aumentado en el segundo semestre de este año, con 32 solicitudes desde julio. En el último semestre del año se ha triplicado la entrada de expedientes y en todo el año se han presentado 42 expedientes, que suman una inversión de 81,8 millones de euros. La inmensa mayoría son ampliaciones de alojamientos turísticos, pero también figuran restaurantes.

La norma que se aprobó por decreto ley establecía que estas ampliaciones se podrían solicitar hasta el 31 de diciembre de este año y el Govern no se plantea la posibilidad de aprobar una ampliación de los plazos para facilitar las inversiones. En el mismo decreto de aprobación de una serie de medidas urgentes y extraordinarias para el impulso de la actividad económica se incluía la posibilidad de permitir el cambio de uso de los hoteles obsoletos para permitir la construcción de VPO o de proyectos asistenciales, como residencias de la tercera edad.

Ni un proyecto de VPO

Si la posibilidad de ampliar hoteles ha tenido un efecto limitado, especialmente en el año 2020, esta otra opción no ha funcionado en absoluto ya que el Govern no ha recibido ni una sola petición para hacer el cambio de uso. El Govern tampoco se plantea prolongar la duración de esta medida, que decaerá mañana con el resto de disposiciones sobre contratación de personal o compra de material que también incorporó el decreto de medidas urgentes por la COVID-19.