Balears ya ha solicitado al Gobierno una ampliación del crédito del plan Moves III, destinado a fomentar la movilidad eléctrica. Esta petición responde al aluvión de solicitudes de ayudas públicas que se han registrado en las Islas para comprar coches eléctricos o instalar puntos de recarga.
El plan, que se activó el pasado verano y desde el 8 de julio se pueden pedir las ayudas, está dotado con 9,3 millones, cantidad que multiplica por cuatro los 2,5 millones de la anterior convocatoria. Pese a este elevado incremento, a mediados de diciembre, el director general de Energia i Canvi Climàtic, Pep Malagrava, escribió una carta al Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE, del Ministerio para la Transición Ecológica) para pedir más dinero. Se trata de una línea de ayudas que si bien se gestiona desde el Govern, está dotado con fondos estatales. En concreto, supone la primera línea de actuación en materia de movilidad sostenible del Plan de recuperación, Transformación y Resiliencia presentado por el Gobierno.
La convocatoria cuenta con dos líneas, una para la adquisición de vehículos eléctricos, dotada con 6,3 millones; y otra para infraestructuras de recarga, con un presupuesto de 3 millones. Para la primera, ya se han presentado solicitudes por valor de más de 3 millones, es decir, la mitad de la cantidad asignada; mientras que para la segunda ya se ha superado el presupuesto. De ahí, la petición al Gobierno de que amplíe el crédito asignado a Balears, que fue la primera comunidad en publicar esta convocatoria de ayudas.
En total, el Govern ha recibido 869 solicitudes por valor de 7,7 millones. De éstas, 687 son para la compra de vehículos eléctricos y las 193 restantes para infraestructuras de recarga.
Caber recordar que las ayudas difieren en función de si se solicitan por parte de particulares o de empresas. Los primeros son los que más peticiones han realizado, hasta 659, de las que 555 son para la compra de un vehículo. En este caso pueden optar a ayudas que oscilan entre los 4.500 y los 7.000 euros. La cantidad máxima se concede para coches eléctricos que acrediten desguace. En el caso de las furgonetas, las ayudas pueden llegar hasta los 9.000 euros si se entrega a cambio una antigua. En cuanto a las motocicletas, las ayudas pueden ir de entre los 1.100 a los 1.300 euros dependiente de si se acredita el desguace. La movilidad eléctrica es una apuesta que gana adeptos entre la ciudadanía y los expertos consideran que Balears es un lugar idóneo para su implantación. Ello se debe a que las distancias a recorrer son cortas, por lo que se pueden llevar a cabo sin temor a agotar la batería.
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