El estudio, realizado a partir de datos de Ben Amics, pone de manifiesto que el 73 por ciento de estas discriminaciones ha tenido lugar en un centro educativo, mientras que otro 60,3 por ciento ha sucedido en espacios de ocio, en una opción con respuesta múltiple.
Además, el estudio muestra que un 88,9 por ciento de las personas encuestadas han sido discriminado de forma presencial, mientras que un 44,4 por ciento ha sufrido esta discriminación a través de redes sociales, y un 27 por ciento, a través del móvil.
Para realizar este ensayo, las autoras de este texto, Tatiana Casado e Isabel Nadal, han entrevistado a un centenar de personas, a quienes se les ha realizado una encuesta telemática, en la primera fase, y una entrevista semiestructurada, en la segunda.
Según han expuesto Casado y Nadal, «existe correlación entre haber padecido LGTBI-fobia y tener pensamientos negativos», pues el ensayo muestra que el 61,7 por ciento de los encuestados ha pensado en suicidarse, mientras que el 22,3 por ciento lo ha intentado.
Las personas encuestadas remarcaron que «para mejorar la atención es necesario incrementar la formación sobre las realidades de las personas LGTBI entre los colectivos profesionales, así como aumentar las actividades de sensibilización en los centros educativos».
En cuanto al tipo de discriminación, el 71,4 por ciento ha sido insultado, al 68,3 por ciento le han «hablado mal», el 65,1 por ciento asegura que han creado rumores sobre ellos y el 57,1 por ciento dice haber recibido burlas e imitaciones.
Además, el 44,4 por ciento ha sido aislado; el 38,1 por ciento, ignorado; el 33,3 por ciento, acosado; el 28,6 por ciento ha recibido amenazas; el 27 por ciento ha sido empujado, el 17,5 por ciento ha padecido agresiones sexuales, y el 12,7 ha recibido palizas.
Por otra parte, los datos señalan que el 55,6 por ciento de las encuestados ha sido discriminado de manera puntual, mientras que un 28,6 por ciento padece discriminación de forma puntual y el 7,9 por ciento restante considera que siempre es discriminado.
En esta misma línea, el 61,9 por ciento de estos usuarios afirma que padece discriminación desde hace más de un año mientras que un 19 por ciento indica que hace menos de un año que ha comenzado esta discriminación.
Por edades, el 77,8 por ciento de las personas encuestadas de entre 12 y 16 años ha sufrido discriminación, cifra que baja hasta el 61 por ciento en el caso de los usuarios de entre 17 y 21 años, remarcan las dos autoras del ensayo.
Asimismo, el 68,4 por ciento de los participantes de entre 22 y 26 ha sido discriminados alguna vez, mientras que esta cifra asciende hasta el 72 por ciento en el caso de los entrevistados de entre 27 y 32 años.
Finalmente, en cuanto a las emociones que han sentido estas personas ante los actos de LGTBI-fobia, el 60 por ciento ha sentido inseguridad, impotencia, tristeza y rabia, mientras que el 40 por ciento ha sentido humillación, vergüenza y miedo.
Esta investigación ha sido financiada por la Dirección General de Infancia, Juventud y Familias de la Conselleria de Asuntos Sociales y Deportes, en el marco de la convocatoria de subvenciones que ofrece el Govern para desarrollar proyectos de intervención.
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