Estas son algunas de las cuestiones abordadas en la reunión del conseller de Movilidad y Vivienda, Marc Pons, con representantes empresariales, colegios profesionales y sindicatos de la construcción, además de instituciones insulares y locales, para hacer el seguimiento de la reanudación de actividad en el marco del estado de alarma por el coronavirus.
La orden autonómica que determina en qué condiciones debe llevarse a cabo la actividad, la única de España, establecía hasta ahora la necesidad de mantener una distancia de seguridad entre los trabajadores, la utilización de mascarillas y la obligación de tomarse la temperatura antes de ir a trabajar, a lo que desde este martes se suma la exigencia de que rellenen un cuestionario sobre su estado de salud.
Es obligación de la empresa pasar los cuestionarios, recogerlos y remitirlos a la mutua de salud o al servicio de prevención de riesgos.
Igualmente, ante la dificultad de mantener la distancia mínima de 2 metros e algunos trabajos que requieran una inferior, se ha acordado que, en estos casos, que se tienen que evitar al máximo, se deben extremar las medidas de seguridad, con la obligación de llevar siempre las mascarillas puestas.
Jornada
La Federación de Entidades Locales de las Islas Baleares (FELIB), ha asegurado a los constructores que pese a la normativa local que fija horarios de mañana y tarde en la mayoría de ayuntamientos, no hay ningún impedimento en que se lleven a cabo jornadas continuas.
Se ha aclarado que no se puede trabajar en edificios donde haya personas ajenas a la obra, como inmuebles plurifamiliares, locales de negocio y empresas que mantengan la actividad o presencia de trabajadores, salvo para reparaciones de urgencia o aquellas en que la obra se pueda aislar totalmente (incluso con entradas y salidas de material, escombros o personal) de la parte habitada.
La orden balear impone que los organizadores del trabajo deben que establecer jornadas de trabajo continuadas, que los trabajadores tienen que estar a una distancia de seguridad (dos metros) y disponer de equipos de protección individuales, usando guantes siempre y que, si para una tarea concreta es necesario mantener una distancia menor, se deben utilizar necesariamente mascarillas que proporcionará la empresa.
Los trabajadores deben estar el mínimo tiempo posible en la calle, se fijarán turnos para las comidas, solo se permite una persona por fila dentro de los vehículos que utilizan los trabajadores para desplazarse al trabajo y en los vehículos de transporte de material pueden ir dos personas como máximo.
Se debe llevar un registro diario de todas las personas que entren a la obra (proveedores, dirección facultativa de la obra, propiedad y comerciales...) y además se fijarán paneles informativos en varios puntos de la obra con las recomendaciones básicas de prevención de contagio de coronavirus.
Habrá además zonas de limpieza con agua, jabón y papel secante o solución hidroalcohólica para el lavado de manos y se aumentarán limpieza y desinfección de las instalaciones de oficinas y también de las herramientas de trabajo.
En cuanto a las medidas preventivas que tienen que adoptar los trabajadores, además de cumplir las recomendaciones de higiene, deberán rellenar la ficha sobre su estado de salud que la empresa debe pasar, recoger y remitir a la mutua o servicio de prevención de riesgos.
Tienen que tomarse la temperatura diariamente antes de ir al trabajo, mantener la distancia de seguridad, contribuir a mantener limpia la obra y las herramientas, emplear guantes y no compartir con los compañeros equipos de protección o cubiertos, vasos o bebidas.
En el supuesto de que un trabajador conviva o lo haya hecho con una persona que se haya infectado, si tiene síntomas o fiebre, lo tiene que comunicar a su responsable directo, además de quedarse en casa y llamar al 061 y seguir las instrucciones de la autoridad sanitaria.
Si es la empresa la que tiene conocimiento de una situación así y el trabajador se encuentra en la obra, será aislado y se dará aviso al 061. No se podrá retomar la actividad hasta que las autoridades sanitarias y el servicio de protección de la empresa establezcan las condiciones adecuadas.
Estas medidas las tienen que seguir también los técnicos que puntualmente se desplazan a la obra (arquitecto director de las obras, aparejador e ingenieros).
El coordinador de seguridad y salud es el encargado de comprobar que se cumplen todos los requisitos y, en caso de incumplimiento, se reclamará al contratista su rectificación y si se reitera el incumplimiento se pondrán los hechos en conocimiento de las autoridades, que podrán suspender la actividad.
2 comentarios
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Diguenme, qui fara tot aço, ninguuuu, lo que tindrien que fer es no escriura tantes normes, alçarse de sa cadira i sercar solucions, test, entre altres coses,
En plena pandemia , la construcción como sus derivados pueden trabajar,en pocas palabras gente inmune?creo que no.Los doctores dicen que no es lo correcto que hay quedar en casa, ya lo dice aquel dicho el hombre es aquel que tropieza dos veces con la misma piedra!nuestros políticos sea gobierno o oposición tropieza muchas más de dos, no por mucho correr vamos a llegar antes .