La medida busca evitar un colapso inmobiliario como el que se produjo tras la crisis de 2008. | David Arquimbau

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Las medidas de apoyo a los trabajadores que este martes aprobó el Gobierno de Pedro Sánchez pueden llegar a beneficiar hasta a 250.000 ciudadanos de Balears que en estos momentos tienen cualquier tipo de hipoteca. Una de las medidas anunciadas por el Gobierno es la aprobación de una moratoria en el pago de hipotecas para primera vivienda para aquellas personas que hayan reducido sus ingresos o estén en situación de desempleo por el coronavirus.

En los últimos quince años, se han firmado en las Islas más de 450.000 hipotecas, pero en el mismo periodo de tiempo se han cancelado otras 200.000, lo que deja unas 250.000 hipotecas vivas en estos momentos. Teniendo en cuenta que el turismo representa el 80 por ciento del PIB de las Islas y da empleo a la mayor parte de los trabajadores, buena parte de estas hipotecas están firmadas por empleados a quienes puede beneficiar las medidas de contención de Pedro Sánchez.

Se prevé que el cierre de todo el sector hotelero y de la oferta complementaria de las Islas deje en el paro de forma temporal a miles de trabajadores de la hostelería. El conseller de Turisme i Treball, Iago Negueruela, ya aseguró el pasado domingo que el Govern prevé miles de despidos temporales en este sector como consecuencia de la aprobación de Expedientes de Regulación Temporales de Empleo (ERTE).

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El Govern también ha anunciado medidas complementarias para ayudar a los trabajadores que puedan perder sus empleos de manera temporal por culpa de la crisis sanitaria, pero en este caso las medidas irán dirigidas a dar ayudas a quienes pierden empleo o ingresos económicos, pero vivan de alquiler. La consellera d'Afers Socials, Fina Santiago, explicó, tras reunirse con las entidades bancarias, que el Govern prepara estas ayudas complementarias.

La consellera señaló que, en la crisis inmobiliaria del año 2008, se comprobó perfectamente cómo las personas que fueron expulsadas de sus viviendas por culpa de los desahucios tardaron mucho más tiempo en recomponer su economía. Por esta razón, pidió a los bancos que lo tengan en cuenta y anunció las ayudas específicas para el alquiler.

El Govern ya tiene en marcha un plan de ayuda al alquiler a fondo perdido para pisos de menos de 900 euros con más de 4.000 beneficiarios durante el año 2018. Las ayudas que prepara el Ejecutivo serán un complemento para las que ya existen en estos momentos, según anunció la consellera.