El congreso reunirá hasta este miércoles a unos setenta investigadores de diferentes universidades y organismos de investigación.
Jiménez explicó que «el clima mediterráneo es muy particular al producirse en un mar cerrado por sistemas montañosos. La región debería tener un clima diferente si atendemos su latitud. Al mismo tiempo, es un clima que presenta una mayor variabilidad en el marco del cambio climático global».
La profesora de la UIB destaca que «precisamente, tras la elaboración de proyecciones climáticas a escala global, las líneas de investigación se centran ahora en niveles más regionales». Jiménez subraya la importancia de «conocer los procesos atmosféricos actuales como instrumentos matemáticos para establecer predicciones. En este conocimiento se incluyen, por ejemplo, el funcionamiento del embat, las nieblas, las olas de calor y de frío o los temporales. Se trata de incorporar estos procesos a los modelos meteorológicos y climatológicos para que las predicciones sean más fiables. Entonces, podremos resolver más ecuaciones entre las que se nos plantean».
Algunos fenómenos, como la ampliación del verano hacia la primavera, son considerados por Jiménez como «una evidencia observacional. En este caso, parece que no hay primavera y el verano empieza antes. Sin embargo, cada año es diferente y esas diferencias también deben ser incorporadas a los modelos. Por ello, son necesarias las series de 30 años para constatar tendencias claras. Y se deben explicar las dos cosas: las tendencias y las variabilidades».
1 comentario
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El clima terrestre está controlado por el sol, este a la vez está controlado por varios factores diferentes que son como ruedas de reloj. En este momento estamos en un cambio de clima cálido hacia uno frío, esto producirá de 2 a 8 años de clima loco, muy variado de un año a otro, malo para el agricultor. Pero en términos generales va hacia el frío, por el sol. Y por cierto cambio de una corriente ecuatorial, altas alturas, que hace que los veranos sean más húmedos y los inviernos más ventosos. Pero todo esto es un cambio lento, y es una teoría local, que se irá comprobando, y ya se constata el mal tiempo dura de 2 a 3 semanas y el buen tiempo lo mismo. Cambio de ciclo, todo natural nada que ver con lo del CO2- cambio climático.