El apoyo a las personas que no pueden valerse por sí mismas, principalmente ancianos, se lleva la parte del león de las inversiones del Govern en gasto social. Cada vez son más los mayores atendidos por los servicios públicos autonómicos en lo que es un puntal del Estado del bienestar. | Archivo

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La actual legislatura, que ha supuesto en Balears el final de la política de recortes por parte del Govern, le supone también haber alcanzado los 157 millones en gastos sociales al año. Fuentes del Executiu califican estas inversiones de «recuperación y creación de nuevos derechos desarrollados a través de tres años de legislatura».

Este «avance en derechos sociales» se centra en diez iniciativas: eliminación del copago farmacéutico; renta social; plan de lucha contra la precariedad laboral; rebaja de las tasas universitarias; retorno a la población inmigrada de la tarjeta sanitaria y recuperación de la gratuidad para todos los ciudadanos; becas de comedor y fondos para libros de texto en las escuelas; incremento del compromiso ante la dependencia: apertura por las tardes de las consultas en los centros de salud; gratuidad de los párkings hospitalarios en Son Espases y Can Misses, y decreto de demora sanitaria.

Respecto al copago farmacéutico desde el pasado 1 de enero, ningún pensionista con una renta inferior a los 100.000 euros anuales paga por sus medicamentos, cuyo coste pasa a ser asumido por el Govern, «esta medida supone que se vean beneficiados 187.419 pensionistas». El Govern invierte 15 millones anuales.

En lo que se refiere a la renta social ya había 11.185 beneficiarios el pasado mes de agosto. La ayuda permite la subsistencia a muchas personas. Una familia con dos niños puede recibir hasta 729 euros al mes (la inversión es de unos 20 millones).

Otro aspecto que el Consolat tiene muy en cuenta es la bajada de las tasas universitaria. La primera matrícula para obtener un grado ya supone un ahorro de 107 euros. Por su parte, la primera matriculación de estudios de másters oficiales supone un ahorro medio de 183 euros. A su vez, la primera matrícula de un máster profesionalizado supone un ahorro medio de unos 264 euros. La inversión total es de 710.000 euros.

Otro aspecto que el Govern tiene muy en cuenta es la creación de la Facultad de Medicina, que entró en funcionamiento en septiembre de 2016. Cada año ingresan en esta disciplina alrededor de 60 alumnos. Esta facultad permite estudiar sin tener que desplazarse a la Península. El gasto es de 1,9 millones cada año.

En la anterior legislatura el Gobierno Rajoy retiró la tarjeta sanitaria a los inmigrantes no regularizados. Esta medida privó de este derecho a 26.800 inmigrantes sin papeles que vivían en Balears. Pero en julio del 2015 el Govern Armengol devolvió la tarjeta a estos colectivos. El pasado agosto se habían beneficiado 15.759 personas. A ello hay que añadir la gratuidad de la tarjeta sanitaria para toda la población. Una iniciativa que no tiene ningún coste es la apertura por las tardes de los centros de salud. Desde diciembre del 2015 se han llevado a cabo 3.860.666 consultas. Otro gasto son las ayudas para compra de libros para estudiantes, con una inversión de 1'5 millones anuales.