Según han explicado, la Guardia Civil de Calvià recibió varias denuncias interpuestas por los gestores de dos salones de juego, en las que informaban de la manipulación de maquinas recreativas de azar.
En la investigación se comprobó que se trataba de un grupo organizado, formado por varias personas, que una vez dentro de los salones actuaban de manera coordinada. Mientras unos se dedicaban a sabotear las ruletas, otros distraían a los empleados para evitar ser descubiertos.
Además, se comprobó que uno de ellos era el gerente de uno de los establecimientos. Este facilitaba el acceso a los sistemas operativos de las ruletas, e, incluso, llegó a dar al cabecilla de la organización instrumentos para manipular las ruletas y su sistema operativo.
Los detenidos cometieron las estafas informáticas en salones de juego de Santa Ponça y Palma, 'crackeando' los sistemas operativos de las ruletas para así manipular las apuestas y obtener numerosos premios, según el relato del Instituto Armado.
Por esto, la semana pasada se detuvo al primero de los miembros de la organización, el gerente de uno de los salones de juego afectados. Se practicó un registro en su domicilio de Palma y en él se intervinieron numerosos objetos de interés para la investigación.
Posteriormente se identificó y se detuvo al cabecilla, una persona de nacionalidad cubana residente en Magaluf.
De esta forma y tras manipular más de 10 ruletas en dos salones de juego, aunque no se descarta otros afectados, los detenidos habrían logrado apoderarse de una cantidad cercana a 50.000 euros.
Una vez puestos a disposición judicial, el juez ha decretado el ingreso en prisión de ambos detenidos. Por el momento se continúa con la investigación para la detención del resto de miembros de la organización.
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