La presidenta de Baleares, Francina Armengol, ha anunciado este martes que en la primera mitad de 2018 la sanidad pública «recuperará» el decreto de garantía de demora que «el anterior Govern eliminó».
Con ocasión del debate de la Comunidad, Armengol ha afirmado que, con la recuperación de este decreto, los pacientes podrán tener «más confianza que el sistema sanitario público funciona en unos términos de calidad y dispondrán de un marco legal que les garantiza una respuesta».
El decreto de garantía de demora de la sanidad pública fija una espera máxima de seis meses para las operaciones y de dos para las consultas y las pruebas diagnósticas.
Pasados los 180 y 60 días, respectivamente, de ese tiempo máximo el paciente podrá solicitar, si lo desea, ser atendido en un centro concertado y autorizado por el Govern, sin coste alguno para el usuario.
Con ocasión de su discurso, la presidenta ha subrayado que la mejora de la sanidad durante sus dos años de gobierno ha requerido incorporar 990 profesionales sanitarios más, una parte de los 1.400 que «despidió el Govern anterior».
Además, en este tiempo se han devuelto 8.800 tarjetas sanitarias a personas porque «no queremos volver a ser una sociedad insolidaria», ni negar la atención al enfermo, ha afirmado Armengol.
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