Jaume Matas y 'Pepote' Ballester, durante el juicio.

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Jaume Matas se ha declarado inocente en las irregularidades en la contratación del arquitecto que diseñó el velódromo Palma Arena y de los que dirigieron las obras, donde afronta peticiones de pena que suman 4 años de cárcel.

El expresidente ha asegurado que él solo tomó la decisión política y que luego «participó mucha gente».

La Audiencia de Palma acoge desde este lunes el juicio al expresidente del Govern Jaume Matas por esta pieza del caso Palma Arena. La vista oral ha comenzado con las propuestas de nueva documentación tanto por parte de la Fiscalía Anticorrupción como de las defensas de Matas y del otro acusado, el exdirector general de Deportes José Luis «Pepote» Ballester por los mismos presuntos delitos.

Ambos están acusados de fraude a la administración y prevaricación en concurso con falsedad.

Entre la documentación que las partes han pedido al tribunal que añada a esta causa, la defensa de Ballester ha solicitado que tenga en cuenta la reproducción de la declaración que prestó el ex director general en el juicio del caso Nóos, en febrero del año pasado, así como varias páginas de la sentencia de esa causa.

Después de las peticiones de documentación, el tribunal ha ordenado un receso para que las partes puedan estudiar lo aportado.

La vista oral es el cuarto juicio que afronta Matas como acusado en el marco de la macrocausa conocida como Palma Arena, tras los celebrados por la contratación irregular de un periodista que le escribía los discursos, por la contratación de su esposa en un hotel y por el llamado caso Nóos.

Tras el primero, Matas cumplió 9 meses de condena por tráfico de influencias y en el segundo fue condenado a pagar una multa de 9.000 euros por cohecho, por un contrato simulado a su mujer como relaciones públicas en un hotel en 2007. En cuanto al caso Nóos, Matas ha recurrido ante el Supremo su condena a 3 años y 8 meses por prevaricación, falsedad y fraude a la Administración.