Una imagen habitual en el centro de las ciudades. La explosión del alquiler turístico está provocando una profunda transformación en algunos puntos de las Islas

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El Govern quiere poner coto al negocio del alquiler turístico entre los grandes propietarios e intermediarios de vivienda vacacional. Es algo que no figura en el proyecto de ley aprobado por el Ejecutivo, por lo que se aprovechará el proceso de presentación de enmiendas para incorporar esta limitación.

Lo más curioso del caso es que quien prepara estas enmiendas es precisamente Més, partido al que pertenece Biel Barceló, el encargado de redactar el proyecto de ley. En el grupo parlamentario están trabajando en la redacción de una enmienda que limite el número de viviendas por propietario o intermediario sin vulnerar la directiva comunitaria de servicio.

Por ahora no se ha cerrado el número de viviendas que un mismo propietario o intermediario podrá alquilar legalmente, pero sí se sabe que la modificación se sustentará en otro proyecto de ley del Govern, el de la vivienda, que aún no ha entrado en el Parlament. La intención es poner coto el fabuloso negocio que proporciona el alquiler turístico a un pequeño número de propietarios que controlan buena parte de la oferta.

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