Condenada una líder vecinal por una trama para estafar a Thermomix

Para llevar a cabo la estafa se aprovecharon de que la líder vecinal, de una asociación que llevaba más de una década inactiva, tenía datos de filiación de otras personas. Las acusadas simulaban que existían ofertas laborales en talleres de cocina, guardería o limpieza y que luego los iban a subvencionar los ayuntamientos de Palma o Llucmajor. De esta manera conseguían datos personales. En otras ocasiones, simplemente robaban correspondencia de los buzones.

Con esos datos acudían a la comercial de la marca e imputaban a distintas personas y cuentas bancarias la compra de los aspiradores y los robots de cocina. En unos pocos meses hicieron siete contratos para comprar aspiradoras. Sin embargo, cuando la empresa se dio cuenta de que los números bancarios eran similares anularon los pedidos.

Algo similar ocurrió con los aparatos de cocina. En dos casos consiguieron la entrega de dos robots. Financiaron con datos falsos las operaciones, cada una por 1.100 euros y de esta manera se hicieron con ellos sin tener que pagar nada. Días después se lo vendieron a dos hermanas por 800 euros cada uno. Más tarde hicieron otras dos operaciones similares a través de un banco.

A los titulares del contrato, que no sabían nada, la financiera comenzó a reclamarles los pagos por unos aparatos que no tenían. A partir de ese momento, en septiembre de 2014 volvieron a poner en marcha el mismo mecanismo en otras seis ocasiones. Ya no funcionó y fueron denunciadas. De hecho, la Policía Nacional detuvo por este caso a cuatro personas. Dos de ellas, que llegaron acusadas al juicio fueron absueltas después de que la Fiscalía retirara los cargos en su contra. En su calificación inicial se les reclamaban cuatro años y medio de prisión a cada una. Thermomix no reclamaba indemnización.