Los consellers Catalina Cladera y Biel Barceló presentaron este miércoles el proyecto de decreto que desarrolla el Impuesto de Turismo Sostenible. | P. Bota

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El Govern quiere que los alquileres turísticos ilegales también paguen la ecotasa y así lo establece el proyecto de decreto que regula el Impuesto de Turismo Sostenible, que este miércoles presentaron el vicepresident y conseller de Turisme, Biel Barceló, y la consellera d'Hisenda, Catalina Cladera.

El decreto, que este miércoles se publicará en el BOIB y estará en exposición pública durante siete días, establece que deberán pagar el impuesto los clientes que se alojen en viviendas turísticas que no cumplen con la normativa autonómica, además del resto de establecimientos ya anunciados.

En el caso de las viviendas que no pueden acogerse a la Ley de Turismo, es decir, pisos en edificios plurifamiliares, deberán tributar en caso de que se comercialicen en canales de oferta turística; que presten servicios propios de una empresa turística de alojamiento; y que se trate de alojamientos de temporada por períodos de tiempo inferiores a los dos meses, excepto que acrediten someterse a la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU). En este aspecto, Barceló reconoció que «solo deben dedicar su vivienda al alquiler vacacional aquellos que puedan hacerlo», por lo que «existen posibilidades de sanciones» por parte de Turisme en el caso de los alquileres ilegales que se detecten.

El conseller recordó que para este verano se ha puesto en marcha un plan de inspección específico para controlar la oferta turística que no esté registrada y que, además, la Agencia Tributaria estatal intensificará su campaña contra los alquileres que no se declaren. «Entonces, se podrán cruzar datos de todas las administraciones», indicó Barceló.