El vicepresidente del Govern de les Illes Balears, Biel Barceló, se ha reunido en la mañana de este lunes con el conseller de Asuntos Exteriores, Relaciones Institucionales y Transparencia del gobierno catalán, Raül Romeva.

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El vicepresidente del Govern balear, Biel Barceló, ha expresado este lunes su apoyo a la acción exterior de la Generalitat de Catalunya y ha manifestado la predisposición de su ejecutivo a ejercer de «puente» con Madrid para intentar encontrar una solución dialogada al conflicto territorial en el Estado.

Barceló se ha reunido la mañana de este lunes con el conseller de Asuntos Exteriores, Relaciones Institucionales y Transparencia del gobierno catalán, Raül Romeva, en pleno contencioso con el Ejecutivo de Mariano Rajoy por la denominación y las competencias de su departamento.

Después de que el Tribunal Constitucional, como consecuencia de un recurso presentado por el Ejecutivo central, suspendiera cautelarmente aspectos de su consellería, Romeva anunció hace dos semanas un retoque en el nombre del departamento, aunque insistió en que él seguiría presentándose como conseller de Asuntos Exteriores.

Tras la reunión, de cerca de una hora en las dependencias del Departamento de Asuntos y Relaciones Institucionales y Exteriores y Transparencia de la Generalitat de Catalunya, en la Casa dels Canonges de Barcelona, Barceló ha expresado su «apoyo» a Romeva ante la «injerencia del Gobierno español».

Barceló ha salido en defensa de que el gobierno catalán «pueda llevar a cabo su acción exterior, como ha pasado siempre».

«El gobierno balear está haciendo acción exterior, sólo faltaría que se cuestionase la posibilidad de que el gobierno de Catalunya pudiese hacerlo también», ha añadido.

Barceló ha trasladado asimismo a Romeva que, en la última reunión que mantuvo la presidenta balear, la socialista Francina Armengol, el pasado mes de septiembre en la Moncloa, con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, le hizo saber la disponibilidad de su ejecutivo a ejercer un papel de «puente» entre Madrid y Catalunya.

Según Barceló, «este ofrecimiento sigue en pie, sea quien sea el presidente del Gobierno español», porque «a todos nos interesa una salida dialogada» y por «vías democráticas» a las tensiones territoriales de los últimos años.