«Mi mujer y mi hijo me dieron una paliza y me dejaron tirado como a un perro»

Bermúdez relata como «el pasado 3 de febrero, sobre las 18 horas, me dirigía a mi domicilio cuando observé que del interior del mismo salían mi mujer y mi hijo, éste último bebiendo una cerveza. Mi hijo comenzó a gritarme. En un momento me agredió, lanzándome al suelo. En ese instante, mi mujer también se sumó a la agresión y ambos comenzaron a propinarme patadas. Tras zafarme de los dos pude salir huyendo del lugar».

«Me refugié en una zona de siembra de palmeras y llamé a los equipos de emergencia. Cuando llegaron los agentes me encontraron tirado en el suelo sangrando por la nariz y la boca. Llamaron a una ambulancia y me hospitalizaron en Son Llàtzer. He tenido que vivir una pesadilla que nunca olvidaré», concluye Gabriel Bermúdez.