La comisión técnica de seguimiento de la sequía agraria se ha reunido este viernes por segunda vez en dos semanas, un encuentro en el que la conselleria ha presentado al sector una ampliación de los estudios que se adelantaron la semana pasada, tal como se le había solicitado.
Tanto el sector como la administración han constatado que, aunque en algunas zonas ha llovido más, no ha sido suficiente y la situación se continúa agravando.
Por eso, el conseller de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, Vicenç Vidal, ha anunciado que se han adoptado un conjunto de medidas para hacer frente a este escenario.
Así, se pedirá al Estado la reducción por pérdidas en la declaración del IRPF, que en principio sólo estaba prevista para Eivissa, aunque ahora el Govern quiere que sea extensivo al resto de las islas.
Además, el ejecutivo prevé ayudas para la compra de alimentos para el ganado, unos 200.000 animales, para la cual se consensuará la cantidad, la tipología y los beneficiarios de esta iniciativa.
El tercer objetivo hace referencia a la campaña programada desde los Servicios de Mejora Agraria y Pesquera (SEMILLA).
Por otra parte, las ayudas para la compra de alfalfa seca a fincas de bovino se duplicará, pasando de 750 toneladas a 1.500, y se seguirán negociando préstamos con el ISBA -Sociedad de Garantía Recíproca de Baleares- para que se avale a las cooperativas en la compra de alimento.
Con respecto a la falta de agua, se quiere impulsar el consumo de aguas depuradas por parte de las comunidades de regantes, para lo cual se precisa de mejoras y del mantenimiento de estas infraestructuras.
Otras medidas pasan por pedir la congelación de la tasa de incineración de los residuos cárnicos, discriminar positivamente a los campesinos a título principal y el impulso de la agricultura ecológica.
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