El Supremo condena a Lorenzo Bravo a indemnizar con 6.000€ a Bauzá por insultarle

El Supremo revoca la sentencia de la Audiencia de Palma que absolvió a Bravo, y argumenta que «la intromisión» que Bauzá «sufrió en su derecho al honor al ser calificado como 'cerdo' o 'gilipollas' no está justificada por el ejercicio legítimo de la libertad de expresión de Bravo, pues este no goza de un derecho a insultar».

La sentencia indica que Bravo no tiene derecho a insultar «incluso aunque el destinatario del insulto ostente un cargo público y los insultos se realicen en relación a polémicas de carácter político o sindical», ha informado la Oficina de Prensa del Tribunal Supremo.

El Supremo estima la demanda y condena a Bravo a realizar a su costa la publicación de una nota informativa del contenido de la sentencia, pues la publicación de la sentencia completa es desproporcionada sin que ayude a la reparación del derecho vulnerado, y a indemnizar al demandante con los 6.000 euros reclamados, que la Sala considera «una cantidad razonable para la entidad de la intromisión».