El hombre, un ciudadano checo de 53 años, ha sido detenido como presunto autor de los delitos de violencia de género y amenazas a raíz de la denuncia de su esposa, que sobre las 21.00 horas de ayer se personó en las dependencias de la Guardia Civil de Palmanova.
La mujer relató que su marido, del que se está separando, había bebido y retenía a su hija en su casa sin dejarla acceder a ella y con la advertencia de que no permitiría que le quitaran a la niña.
Se personaron en el lugar agentes de distintas unidades del instituto armado, incluido un experto en negociaciones que intentó entrar en contacto con el hombre, pero este no respondía ni a las llamadas de teléfono, ni al timbre, ni al portero automático.
Tras numerosos intentos y ante la falta de respuesta, los guardias optaron por acceder por la fuerza para evitar que el padre pudiera hacer daño a la niña o él mismo.
Derribaron la puerta y entraron hasta una habitación donde dormían el hombre y su hija, que en ningún momento estuvo en riesgo, subraya la Guardia Civil.
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