A partir del 1 de junio y hasta el 30 de septiembre no podrán circular por la isla más de 16.000 coches de alquiler, 4.108 automóviles de turistas y 60 cuyo titular resida en Formentera
Coches de alquiler disponibles para circular este verano por Eivissa.
Eivissa pondrá límites este mismo verano a la entrada de vehículos en la Isla. Tras la aprobación de la ley de control de la afluencia de vehículos en la isla de Eivissa para la sostenibilidad turística por parte del Parlament balear el pasado 29 de octubre, el Consell d’Eivissa ha propuesto que el tope de vehículos en verano, desde el 1 de junio hasta el 30 de septiembre, se sitúe en 20.168 diarios, excluyendo los vehículos de los residentes.
Una limitación que no tan solo afectará a los coches de alquiler y caravanas, como ya se había avanzado, sino que también limitará la entrada de vehículos de turistas. Concretamente, la propuesta técnica que ahora está en exposición pública para posteriormente ser aprobada por el pleno del Consell d’Eivissa establece un máximo de 16.000 vehículos de flota de ‘rent a car’ diarios circulando por la Isla, 4.108 vehículos de turistas (incluyendo caravanas y autocaravanas) y 60 vehículos para los residentes en Formentera.
El techo fijado de 20.168 vehículos son 2.500 más del máximo que el informe técnico de la propuesta considera que no debe sobrepasarse. El estudio, elaborado por la empresa Movytrans, señala que la movilidad en transporte privado en Eivissa durante el verano es de 87.449 vehículos al día, de los que 67.281 son de residentes, 2.049 de turistas y 18.119 de coches de alquiler. Y fija el tope de vehículos de no residentes que podrían circular en 17.668, un objetivo que no se alcanzará, previsiblemente, hasta el quinto año de aplicación de la nueva regulación, es decir, 2030. La disparidad de cifras ofrecidas por el estudio elaborado por Movytrans, que cifra en 18.119 los coches de alquiler que circulan por Eivissa en verano, por los 12.500 que ofrecen las propias empresas de ‘rent a car’, el Consell se ha decantado por establecer un máximo de 16.000 vehículos de alquiler sin conductor para este verano que se adjudicarán a través de un sistema de cupos teniendo en cuenta las peticiones por parte de las empresas.
Eivissa cuenta con más de un vehículo por habitante.
CARAVANAS. Eivissa le ha declarado la guerra a las caravanas y autocaravanas, que solo podrán entrar a la isla si pueden demostrar que tienen plaza en uno de los pocos ‘campings’ que habilitan espacios para ellas. De hecho, desde la entrada en vigor de la ley que limita la entrada de vehículos a la Isla, las autoridades ya tienen potestad para multar con entre 10.000 y 30.000 euros a las caravanas y autocaravanas que no dispongan de reserva en un ‘camping’ o estén estacionadas en suelo rústico. Previo a la imposición de sanciones, los ayuntamientos y el Consell d’Eivissa tienen previsto llevar a cabo una campaña de información para que a los caravanistas no les pille desprevenidos. «Tenemos una problemática muy grave con la proliferación de asentamientos, especialmente con las caravanas. Intensificaremos los controles de todas las caravanas que estén estacionadas en suelo rústico, porque la ley impide su estancia si no disponen de reserva en un camping autorizado», avisa el presidente del Consell d’Eivissa, Vicent Marí. En esta limitación en la llegada de caravanas y autocaravanas están exentas las que tenga su domicilio fiscal en Eivissa, es decir, cuyo propietario sea residente en la Isla.
En paralelo, el Consell d’Eivissa trabaja en el diseño del sistema informático integrado en las páginas web de las navieras, que serán las que se encargarán de cobrar las tasas pertinentes y de transmitir al Consell en tiempo real las matrículas de los vehículos que embarquen y desembarquen en la isla. Una plataforma informática de intermediación de datos que también tiene que servir para tramitar las sanciones de forma automática una vez se detecte que un vehículo está circulando por Eivissa sin permiso.
«Hay que desarrollar las aplicaciones informáticas y lleva su tiempo. Estamos hablando de poner sanciones y hay que hacer las cosas bien, aunque vamos avanzando mejor de lo que esperábamos. Queremos que sea casi todo automático», destaca el director insular de Transportes, Roberto Algaba. En este sentido, el Consell d’Eivissa quiere evitar lo que sucede en Formentera, donde la tramitación de las sanciones se alarga en el tiempo y muchos infractores no reciben la multa hasta meses después. Seis años después, Eivissa emprende el mismo camino que Formentera a la hora de limitar la entrada de vehículos a la isla y reducir la sensación de saturación durante el verano. Cabe destacar que el parque móvil en 2023 de la mayor de las Pitiüses es de 1.010 vehículos por cada mil habitantes, es decir, más de un coche por residente en la Isla.