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Dos hermanos de ocho y cinco años se han reencontrado en un hospital de Texas en el que estaban ingresados desde que el pasado 7 de abril tras sufrir un accidente de coche en el que murieron sus padres y su hermana de dos meses.

Angie de ocho años, sufrió lesiones cerebrales que la dejaron en coma, y cuando despertó la primera persona por la que preguntó fue por su hermano Zachary, quien también estaba en el hospital. Sin embargo los niños tuvieron que esperar una semana antes para que Zachary estuviera recuperado y pudiera mantenerse en una silla de ruedas.

En el emotivo reencuentro ambos hermanos se tumban juntos y se dan la mano.

En el coche también viajaba Nicholas, su hermano de dos años, que ya ha sido dado de alta y cuya salud va mejorando poco a poco. Wyatt, su otro hermano de cuatro años, continúa ingresado y sufre parálisis en la parte izquierda de su cuerpo. La tía de la madre de la familia aseguró que «el pequeño Zachary se rompió la espalda, pero todavía puede sentir sus tobillos, eso es increíble», explica Teresa Burrel.

La mujer explica además que será muy difícil hacerles entender que han perdido a sus padres y a su hermana pequeña. Pero esto no es todo, Teresa ha abierto una página en Facebook para recaudar fondos para costear los tratamientos médicos de los niños.