Además de la emoción del momento y el cariño de sus compañeros, Esther se lleva 12.000 euros para invertirlos en su formación y un curso de cocina de la mano del prestigioso Basque Culinary Center.
Su propuesta, que impresionó a los cocineros que han seguido de cerca su progresión, y al invitado Dabiz Muñoz, consistió en un canelón de aguacate relleno de langostinos con cítricos de primero, un salmón con cítrico y salicornia como plato principal, y un rico postre a base de mousse de nueces, bizcocho y toffees.
Buena cuenta dieron de él algunos de los participantes de la segunda edición de MasterChef Celebrity, que recientemente se adjudicó Saúl Craviotto, y que ejercieron de comensales.
Además de su interés por la cocina, esta risueña y sensible niña disfruta con la pintura o el flamenco. La gran final fue el programa más seguido del concurso, y reunió ante el televisor a algo más de tres millones de espectadores con más del 23% de cuota de pantalla.
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