La diputada y líder de Podemos, Ione Belarra. | Efe - Javier Lizón

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Podemos y PSOE han cerrado este jueves un acuerdo por el que la formación morada apoyará el paquete fiscal del Gobierno, que logrará así su aprobación en la votación prevista para esta tarde, a cambio de un impuesto para las energéticas que se abordará en una ley diferente.

Según han explicado el Gobierno y Podemos, el acuerdo pasa por constituir una comisión negociadora con participación de todos los partidos políticos que apoyarían la norma -PSOE, Sumar, PNV, ERC, Bildu, Junts, BNG y CC- para impulsar una proposición de ley que contenga un impuesto para las empresas energéticas. En caso de que no se lograra un consenso antes de final de año, el Gobierno prorrogaría el actual gravamen energético un año con un real decreto ley, de manera que afecte a 2025, evitando así que decaiga.

El futuro impuesto tendrá que ser compatible con el compromiso adquirido por el Gobierno con Junts de no gravar las inversiones que se comprometan con la descarbonización. «La complejidad técnica de este impuesto y la necesidad de hacer un análisis riguroso de esta figura tributaria hace necesario seguir trabajando con los grupos para la justa contribución de este sector», apunta Podemos. En los pasillos del congreso, la vicepresidenta y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha felicitado a todos los grupos por su capacidad para negociar y ha asegurado que confía en el diálogo para consensuar esa ley antes del 31 de diciembre.

El Gobierno pactó inicialmente con Junts dejar decaer el impuesto energético, pero ante la falta de apoyos finalmente acordó con ERC, Bildu y BNG mantener el tributo en un real decreto ley, aunque sin gravar las inversiones en descarbonización. Ahora, ha pactado con Podemos que la figura tributaria se negocie entre todos los grupos.

La aprobación de la ley que transpone la directiva europea sobre el tipo mínimo de las multinacionales y el paquete fiscal del Gobierno ha estado en el aire hasta el último momento, ya que Podemos reclamaba garantías de que el gravamen a las energéticas lograría un mínimo de recaudación. El paquete incluye medidas como subir el IRPF a las rentas del capital superiores a 300.000 euros, gravar los vapeadores o subir la fiscalidad del tabaco, a las que se podrían incluir nuevas medidas si resultan aprobadas nuevas enmiendas.