Puigdemont llama a Junts a ser alternativa a Illa y apuesta por renovar mensajes y liderazgos

Lo ha dicho en una intervención en el marco de las jornadas de trabajo que el grupo de Junts en la Cámara catalana celebra este miércoles y jueves en Waterloo (Bélgica) para preparar las líneas estratégicas del curso político y también del Debate de Política General (DPG). Puigdemont ha asegurado que el Ejecutivo que lidera Illa «se aguanta por un pacto de investidura que no se creen ni los que lo firmaron», en alusión a PSC y a ERC, y ha añadido textualmente que solo queda Junts como alternativa viable al Govern socialista.

«Lo tendremos que hacer renovando mensajes, discursos, liderazgos, ampliando el espectro social al que tradicionalmente nos dirigimos», y ha pedido a los diputados de Junts aportar su talento, conocimiento y experiencia al objetivo de construir esta alternativa. También ha acusado a Illa de tener como objetivo «desnacionalizar» Cataluña y disfrazarlo bajo un discurso de normalización, y ha criticado que el presidente catalán no tuviera un recuerdo este martes por el 7 aniversario del 1-O y, en cambio recibiera al exlíder de Unió Democràtica de Catalunya (UDC), Josep Antoni Duran i Lleida. Ha reprochado a Illa que asistiera a las manifestación unionista del 8 de octubre de 2017 y que el exministro socialista y actual Alto Representante de la Unión Europea para la Política Exterior Josep Borrell hablara de «desinfectar Cataluña», según él.

«Han llenado su Govern con cargos de esta ideología, de Sociedad Civil Catalana. Por eso Illa va al besamanos del rey Felipe VI, que hace 7 años pronunció un discurso impropio de un Jefe de Estado», en alusión al discurso del monarca del 3 de octubre de 2017.

Puigdemont, que ha definido a Junts como el partido «más interclasista y transversal de la sociedad catalana», ha asegurado que es responsabilidad de la formación señalar la deriva sectaria que, según él, está tomando el Govern de la Generalitat. Ha apuntado a «una falta de reflejo de la pluralidad política» en las instituciones catalanas porque la mayoría están gestionadas por el Partido Socialista, y ha citado el Gobierno central, la Generalitat, la Diputación de Barcelona y el Ayuntamiento de Barcelona.

«Todo pasa por unas únicas manos. ¿Esto es un reflejo de la realidad del país? En absoluto», y ha recordado que PP permitió que Jaume Collboni sea alcalde de Barcelona, a pesar de que el candidato de Junts y exalcalde de la ciudad, Xavier Trias, ganó las elecciones.