La sociedad civil independentista, entre la reivindicación y la autocrítica

Más tarde Antich ha asegurado que Cataluña «avanza cuando la fuerza de la sociedad civil trabaja en los grandes consensos, como que Cataluña es una nación y que tiene derecho a decidir democráticamente su futuro». El presidente de Òmnium Cultural ha pedido también al independentismo autoexigencia, que haga «la autocrítica necesaria» y redefinir estrategias ante una pérdida de poder político de los partidos independentistas en el Parlament.

Lo ha dicho en un acto de Òmnium este miércoles con motivo de la Diada de Cataluña, en el que han participado, además de la Junta Directiva de la entidad, representantes de asociaciones juveniles que han leído un manifiesto al inicio. Antich ha instado a llegar a «acuerdos fundamentales en clave constructiva más allá de las diferencias legítimas entre las distintas organizaciones» y un compromiso con el futuro y con el derecho a decidir de la sociedad catalana. «No estamos aquí para alimentar la lucha fraticida, el mal humor y los reproches», y ha añadido que el independentismo debe entender que ya no es 2017, sino 2024, y ha pedido no alimentar la autocomplacencia.

En este sentido, ha destacado la transversalidad y el pluralismo del movimiento independentista: «Esto va de democracia y, por tanto, de respeto por el pluralismo y el respeto por la diversidad. La discrepancia política es enriquecedora, pero es necesario un proyecto conjunto, firme y leal».
Ha fijado como prioridades la incidencia política de la sociedad civil con los partidos y las instituciones; la vertebración de la sociedad civil y las luchas compartidas; y la «construcción nacional» con la lengua catalana como eje de la cohesión social.

«El Estado español ni reconoce que Cataluña sea un sujeto político ni el Estado español permite que Catalunya pueda decidir su futuro. Si hoy estamos aquí es porque sigue bien viva la voluntad mayoritaria del pueblo de Catalunya», ha concluido Antich, que aseguró que no habrá normalidad hasta que se aborde el conflicto político.

También ha afirmado que en el proyecto conjunto que defiende Òmnium no tiene cabida la extrema derecha: «Y sí, nos referimos a Aliança Catalana, también. Ninguna complicidad con los discursos de odio, ninguna complicidad con posiciones elitistas, xenófobas, racistas o nacionalpopulistas, lleven la bandera que lleven». «Siempre nos encontrarán de cara. El odio a la diferencia ya la pobreza no tienen lugar en nuestro proyecto de país. La lucha por la libertad de Cataluña es la lucha por la libertad de todos y todas, sin exclusión», ha añadido.