Concentración con velas ante Cort de la Associació d'Amics del Poble Saharaui, una entidad de largo recorrido en Mallorca. | Laura Becerra

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Tormenta en los gobiernos progresistas, tanto en Baleares como a nivel estatal, por la decisión inesperada del presidente Pedro Sánchez de apoyar la tesis de Marruecos para dar salida al histórico conflicto sobre la soberanía del Sáhara Occidental. Este pasado viernes Unidas Podemos, con la vicepresidenta Yolanda Díaz a la cabeza, rechazó de plano el anuncio de que España apoyará el plan de autonomía de Rabat para los saharauis, algo que este sábado han hecho también los socios de los socialistas a nivel balear en un momento de especial convulsión a nivel internacional por múltiples factores.

En concreto, el coordinador de Més per Mallorca, Lluís Apesteguia, ha manifestado la total oposición de la formación ecosoberanista ante el cambio de posición del gobierno español en el conflicto entre el Sáhara Occidental y Marruecos. España, de la mano del gobierno del PSOE y Podemos, ha enviado esta semana una carta al reino de Marruecos en la que muestra su conformidad con el plan marroquí que quiere dotar al Sáhara Occidental de un estatuto de región autónoma dentro del reino alauí. «Este estatuto sólo pretende asegurar la ocupación marroquí de un territorio que históricamente no les corresponde y que por encima de todo sólo pertenece a sus legítimos habitantes: los ciudadanos y ciudadanas del Sáhara Occidental» ha explicado Apesteguia.

Por su parte, el Frente Polisario ha criticado este sábado al Gobierno español por avalar el plan de autonomía de Marruecos para el Sáhara Occidental, y ha asegurado que, de esta forma, España «apoya la ocupación» y «legitima la represión» contra su pueblo. «La posición expresada por el Gobierno español (...) carece de credibilidad, seriedad, responsabilidad y realismo, porque es una desviación peligrosa, contradice la legitimidad internacional, apoya la ocupación, (...) y pretende legitimar la represión, crímenes de guerra (...) y el saqueo de riquezas que Marruecos continúa empleando contra el pueblo saharaui», ha asegurado en un comunicado.

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Además, el Polisario ha lamentado que este cambio de opinión «parece ser» el resultado «de intensos meses de chantaje marroquí» contra España para restablecer las relaciones diplomáticas «a su estado anterior». La nueva posición del Gobierno de España ha sido calificada por el Polisario como «muy peligrosa» por mostrarse «en claro apoyo al enfoque unilateral» de Marruecos, «en contradicción con el Derecho Internacional». En el comunicado, ha recordado a España que organizaciones internacionales como la ONU, la UE o la Unión Africana no reconocen «ninguna soberanía marroquí» sobre el Sáhara Occidental.

«Esperábamos que España, por imparcialidad y sentido de sus responsabilidades legales e históricas, acompañara a las dos partes y al nuevo enviado personal (de la ONU) para revitalizar el proceso político. Es lamentable que Madrid opte, una vez más, por someterse al chantaje marroquí y disipar las esperanzas que existían, alimentando la tensión, la escalada y empujando hacia más desatinos», ha detallado el Polisario. Por otra parte, el grupo ha asegurado que España «no puede despojarse unilateralmente de sus responsabilidades jurídicas» para con el Sáhara Occidental y su pueblo, ya que es «una potencia administradora del territorio» a la espera de la descolonización del mismo.

También ha señalado a España como el «principal responsable del sufrimiento del pueblo saharaui», por «la herida sangrante» que el país dejó en 1975. El Frente Polisario ha hecho un llamamiento a las fuerzas políticas españolas y «a todos los pueblos de España» para presionar al Gobierno español para que «corrija este lamentable error», y obliguen así al Ejecutivo a «asumir sus responsabilidades originarias».

Estas declaraciones han tenido lugar después de que este viernes se haya dado a conocer una carta que el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, ha mandado al rey Mohamed VI, en la que ha asegurado que avala como una «base seria y creíble» el plan de autonomía de Marruecos para el Sáhara Occidental para encontrar una solución al conflicto. La antigua colonia española del Sáhara Occidental fue ocupada por Marruecos en 1975 pese a la resistencia del Frente Polisario, con quien se mantuvo en guerra hasta 1991, cuando ambas partes firmaron un alto el fuego con vistas a la celebración de un referéndum de autodeterminación, pero las diferencias sobre la elaboración del censo y la inclusión o no de los colonos marroquíes ha impedido hasta el momento su convocatoria.

Punto de vista

Un momento delicado

La noticia del cambio de postura de España con respecto a la soberanía del Sáhara Occidental se produce en un momento delicado, y debe circunscribirse en el actual contexto de convulsión internacional por la guerra en Europa. Además, la tensión energética obliga a España a cuidar al máximo las relaciones con los países del Magreb: todos los elementos son necesarios para que el gas argelino llegue a las plantas españolas a través del gasoducto de Marruecos. Por si fuera poco con esto, la presión migratoria sobre Canarias, Ceuta y Melilla y Andalucía ha sido el tercer argumento de peso para virar la mirada de Madrid sobre el Sáhara, acercándola al pacto que Rabat arañó a Washington en los estertores del mandato de un tal Donald Trump.